Buenos Aires, 30 de noviembre.- Después de años de posar frente a la lente de la cámara de algunos de los más prestigiosos fotografos, Catherine Fulop decidió pasar para el otro lado. “Hace siete meses empecé a estudiar fotografía con Julieta Escardó. Estoy estudiando en San Fernando, el taller de Lucrecia Urbano que es una artista under muy interesante. No me interesa la moda y el estudio, quiero aprender a congelar instantes de la vida y meterle a eso un poco de arte”, dijo la venezolana.
“En las clases aprendo la importancia de los elementos de la cámara para trabajar la velocidad, el diafragma, la luz, la técnica, lo básico para poder capturar lindas imágenes” detalló. “Mi objetivo es afinar mi mirada y usar eso como vía de escape. Ver más allá de lo obvio”, confesó.
Además, le contó al portal Puroshow.com cuál es su nueva manía: “Voy con la cámara por todos lados. A veces la llevo en el auto y me bajo a tomar fotografias de cosas que voy viendo." "El otro día me quería bajar a hacer fotos en el Rosedal pero me dio vergüenza porque había mucha gente y pensé que podrían reconocerme. A pesar de que no pensé en dedicarme a esto profesionalmente, en algún momento me gustaría exponer. Todavía no sé sobre qué tema pero no va a ser algo relacionado a la moda ni modelos. Seguramente va a ser algo relativo a la naturaleza. En Chile vi paisajes asombrosos y creo que alguien tiene que capturar semejante maravilla" dijo.
"Me gusta registrar situaciones de la vida sin preparar. Estoy interesada en retratar la muerte, porque tengo algo fuerte con la muerte por estos tiempos. Y también me interesa registrar la enfermedad. Por ejemplo, en casa tengo álbumes de mi familia con fotos de mis hijas enfermas, con golpes de sus caídas de niñas, y hasta a mi padre agonizando", reveló.
