No todo fue color de rosas ni todas las lágrimas fueron de emoción. Aunque en general las chicas vivieron una experiencia inolvidable, este año la intimidad en la capacitación de las candidatas a Reina del Sol no fue una proclamación a los cuatro vientos de que había 19 nuevas amigas. La convivencia estuvo marcada por internas, discusiones y llantos, al punto que obligó a una reunión entre ellas y las autoridades para reencarrilar la situación, a días de la elección, según fuentes calificadas.
Si bien para algunas chicas fueron hechos aislados y parte de una competencia no apta para sensibles, para otras se convirtió en un problema grave que hasta las llevó a pensar en renunciar.
Según indicaron personas allegadas al día a día de la capacitación, hubo un grupo de tres candidatas que buscó protagonismo y que en general no se llevó bien con el resto.
Una de esas candidatas en particular fue definida como altanera y con facilidad verborrágica para desprestigiar a sus colegas, al punto que hizo llorar a varias por su trato despectivo.
A su vez, la rotación de compañeras de cuarto (una modalidad implementada para fortalecer lazos) para algunas fue difícil de tolerar. De hecho, una de las chicas se encerró en su habitación del hotel y no dejó entrar a su circunstancial compañera, por lo que esa candidata tuvo que retirarse y pedir compartir la cama con otra colega.
A su vez, las fuentes indicaron que el nivel de intolerancia era tal, que a una de las aspirantes a la corona le escondieron una botella con alcohol debajo de su cama, para que fuera advertida por la Comisión de Reinas y eventualmente fuera sancionada.
También había excesivos celos por parte de un grupo de chicas con respecto a quienes trataban de figurar constantemente por sobre el resto ante la presencia de los medios, a la vez que en una de las jornadas se produjo una discusión entre dos candidatas que terminó con una empujando a la otra, quien trastabilló sobre uno escalones del hotel donde se alojaron.
La situaciones de tensión que se generaron durante el tiempo que duró la capacitación (desde la última semana de enero hasta la noche final en el Autódromo) hizo que al menos cuatro chicas analizaran la posibilidad de renunciar. Una, de hecho, deslizó la chance a través de las redes sociales.
La Comisión de Reinas, al tomar conocimiento de lo que pasaba, reunió a todas las chicas para frenar lo que sucedía en la intimidad de la convivencia. Ahí, las autoridades trataron de llevar calma, aclararon algunas normativas vigentes y a todas las candidatas les pidieron que olvidaran los conflictos para disfrutar la experiencia.
Luego de esa reunión bajó la tensión, pero para algunas fue un alivio el final de la Fiesta del Sol. Las fuentes explicaron que la elección de la representante de Jáchal como Reina también fue un desahogo entre las candidatas, pues la chica, al igual que la virreina, no entró en conflicto con sus pares.