Luego de emitir un comunicado en el que informó la decisión de suspender a un sacerdote local luego de una denuncia por un supuesto caso de abuso contra un menor, monseñor Jorge Lozano habló con DIARIO DE CUYO y dio a conocer las medidas que tomará la Iglesia en paralelo a la investigación judicial.
“Nos enteramos del caso ayer, ante una versión periodística que se dio a conocer sin mayores precisiones. Empezamos a hacer algunas averiguaciones y constatamos que el papá hizo una denuncia policial, el niño es sobrino del sacerdote. Comenzamos a ver de qué se trataba y charlé con él sobre la situación”, sostuvo Lozano.
Y explicó que “lo que estamos haciendo es seguir los pasos que establecen el Derecho Canónico, las orientaciones del Vaticano y la propia Conferencia Episcopal. En cuanto tenemos una noticia radicada con formalidad debemos tomar esta decisión –de separar al sacerdote-. No se trata de un chisme sino de una denuncia hecha, en este caso en el ámbito judicial: si se hubiera hecho en el ámbito de la curia también hubiéramos tomado el mismo procedimiento”.
En cuanto a los pasos a seguir desde la Iglesia, en paralelo a las tareas de la Justicia, detalló que “lo que tenemos solo es la presunción de un delito. Frente a la presunción nosotros tomamos este camino precautorio. Separamos de toda tarea pastoral. Él ahora verá como hace su defensa en el plano de los Justicia, buscará un abogado que lo asesore y lo acompañe en esta tarea. Nosotros, a su vez, hacemos nuestra propia investigación, no para suplir a la Justicia sino porque, depende de cuáles sean los resultados, veremos qué decisión se tomará en torno a él como sacerdote”.
En este sentido, dijo que se designará a un sacerdote para realizar un seguimiento de lo que se declare a nivel judicial y de lo que manifiesten las personas que se refieran al tema. “El objetivo es reunir parte de la información, porque la justicia establecerá la inocencia o responsabilidad de acuerdo a leyes, más allá de eso, nosotros debemos resolver qué es lo que corresponda como sacerdote”, afirmó Lozano.
Y aseguró que “de acuerdo a los procedimientos, a algunas cuestiones las podré resolver yo y lo que se investigue se enviará a Roma para que allí decidan ellos o me aconsejen”.
Para finalizar aclaró: “Nosotros quedamos a disposición de la Justicia, por si consideran que hay algo que podamos aportar”.
El caso
El padre del menor de 15 años que habría sufrido el abuso es quien se acercó a realizar la denuncia policial. El chico es sobrino del sacerdote (del que se reserva la identidad para proteger al menor debido al vínculo familiar), que actualmente cumplía funciones como vicario en la parroquia de Angaco.
Ante tamaña denuncia, el Arzobispado San Juan de Cuyo decidió separarlo hasta tanto se aclare la situación.