Dice que nació bióloga. Que su madre siempre tuvo que revisar los vasos antes de colocarlos en la mesa porque de seguro había en su interior algún "bicho" de los que ella recolectaba. Hoy, ya es abuela y peina canas, pero aún conserva intacta su pasión por el estudio de los insectos que la llevó a concretar trabajos que la posicionaron como una científica de trayectoria y prestigio internacional. Se trata de María Alejandra Perotti, una argentina experta en Acarología y Entomo-parasitología forense, que se dedica a estudiar e interpretar la información que aportan los rastros biológicos no humanos (ácaros, piojos y demás organismos) sobre un cuerpo muerto. Gracias a su experiencia científica, participó en la investigación de crímenes en diferentes países. Y ahora lo hará en San Juan. Tras 22 años de vivir y trabajar en Inglaterra, Perotti se mudará a la provincia para aportar su saber a la Justicia sanjuanina.

En el '99, la bióloga María Alejandra Perotti se doctoró en Acarología Forense. Dos años más tarde, ya formaba parte del plantel docente de la Universidad de Reading, en el Reino Unido, donde aún se desempeña, sin dejar de lado la investigación. "Siempre tuve esa curiosidad por estudiar la utilidad de los ácaros en situaciones forenses, en escenas de crímenes, ya que aportan mucha información valiosa sobre el individuo portador, aunque haya pasado muchísimo tiempo de su muerte. En 2006, junto a mi marido Henk Braig (biólogo holandés), lideramos un grupo de científicos de Inglaterra, España y Estados Unidos que se dedicó a investigar más sobre Acarología Forense. Gracias a esa experiencia, logré determinar el origen de las momias sanjuaninas tras analizar el ADN de los piojos y liendres que conservaban en sus cabellos", dijo Perotti.

María Alejandra dijo que, pese al paso del tiempo, su curiosidad y ansias de saber continúan intactas como en su inicio profesional. Y que lo mismo sucede también con la satisfacción personal de compartir sus conocimientos. Ese fue el motivo por el que decidió continuar su carrera en la provincia. "Nunca se me fue la pasión por mi especialidad forense. Soy muy empecinada con mi curiosidad porque quiero seguir aprendiendo. Tendré 90 o 100 años, si es que llego a esa edad, y seguiré preguntando. Esto me mantiene activa y trabajando en nuevos desafíos. Por eso decidimos venir a San Juan a vivir y a trabajar", dijo la mujer.

La bióloga contó que, con su marido, decidieron salir del Reino Unido para continuar y terminar sus carreras en otro destino. Y que tuvieron en cuenta la "necesidad" de científicos para elegir la provincia de San Juan. También agregó que, a través del Conicet, se dio esta oportunidad. "Tengo toda mi familia en Buenos Aires, pero no queríamos instalarnos ahí. Queríamos hacerlo en un destino donde hiciera falta el bagaje de conocimiento y de innovación que nosotros podemos aportar y transmitir. Vimos que podríamos aportar todo esto a San Juan para darle un impulso a la actividad científica. Pero, no sólo aplicaremos lo sabido, sino que también generaremos conocimientos nuevos", destacó la especialista.

Perotti adelantó que, tanto ella como su marido, trabajarán en dos proyectos nuevos que también brindarán importantísimos aportes para el esclarecimiento de muertes y crímenes. Dijo que ella trabajará en el análisis o autopsia de los ácaros y demás insectos asociados a fosas comunes para descubrir y entender qué información aportan sobre estas muertes. "En Argentina, hay fosas comunes, con varias personas enterradas juntas, relacionadas con la época militar, como en otros países están relacionadas con guerras, por ejemplo. Y, hasta ahora, lo único que se ha hecho en fosas comunes es la identificación de los humanos que están ahí. Nunca se utilizó la información que pueden brindar los insectos y todos los otros rastros biológicos que no son humanos. Es la forma de conocer qué paso verdaderamente. A este análisis me voy a dedicar próximamente", dijo la experta.

Yo voy a aportarle a San Juan mis 25 años de experiencia internacional al servicio de la ciencia". María Alejandra Perotti - Experta en Acarología Forense

Perotti dijo que aún no sabe con exactitud cuándo comenzará a trabajar en San Juan. Sí, que lo hará en el laboratorio del Museo de Ciencias Naturales, de la UNSJ, desde donde buscará vincularse con el ámbito judicial para aportar sus conocimientos en caso de ser necesario y de ser requeridos. "Ahora estoy interviniendo en casos de asesinatos en Chile, Australia y Escocia, como lo hice anteriormente en otros países de Europa y África. Es que la Acarología Forense es apasionante e inagotable. Yo siempre les aclaro a los fiscales que no soy yo la que habla, sino los ácaros o demás rastros biológicos no humanos. Yo sólo interpreto lo que ellos dicen", sostuvo la científica.

Amante de la naturaleza y de los animales, y no tanto de la gente, María Alejandra contó que eligieron el departamento Zonda para vivir cuando concreten su mudanza de Inglaterra. Agregó que en este lugar encontró un ámbito natural que le proporcionará la tranquilidad que necesita para relajarse tras una jornada intensiva de trabajo. "Me encanta la creatividad, tanto en lo que hago en mi trabajo como en mi vida privada. Y Zonda es ideal para desarrollar algunos hobbies que tengo como es tejer. Cuando ya me establezca en San Juan voy a aprender a tejer en telar. Con mi marido tenemos muchas expectativas de la nueva vida que nos espera en esta provincia", dijo Perotti.

Otro gran aporte

El científico holandés Henk Braig, marido de María Alejandra Perotti y también docente en la Universidad de Reading, en el Reino Unido, es un experto en ADN, en parasitología molecular, rastros forenses y en ADN ambiental (airforensics). Justamente, sobre este último tema trabajará en San Juan cuando asuma su nuevo puesto en la Universidad Nacional de San Juan. Así lo adelantó Perotti, quien también dio detalles sobre este proyecto. "El proyecto de Henk es sobre rastros forenses en el aire. El mismo consiste en que, en una habitación donde se llevó a cabo un crimen, se captura y analiza aire de ese lugar con metodologías muy modernas. De esta manera, se puede determinar el ADN de las personas que estuvieron en esa habitación e identificarlas. Realmente es un trabajo muy interesante de ADN ambiental que, hasta ahora, no había sido desarrollado", dijo la científica.