Por Celeste Roco Navea
A lo largo de la calle Rivadavia, sobre uno de los laterales de la Catedral San Juan Bautista, se ubicaron decenas de emprendedores con sus productos en lo que fue una nueva edición de la Feria Agroproductiva. Productos frescos, económicos y de gran calidad decoraban los distintos mesones, pero hubo que llamo la atención de más de uno que no pudo evitar consultar si lo que sus ojos veían era cierto: un pan dulce, pero salado.
Sí, suena incongruente, pero es habitual de cara a las fiestas de fin de año encontrarse con una infinidad de opciones de pan dulce elaborados por pasteleros y panaderos locales que cada año buscan la manera de darle un toque novedoso al producto para que destaque del resto. Así, podemos toparnos por ejemplo con pan dulce relleno de chocolate o pasta de maní, decorado con bombones o galletas de chocolate, e incluso hay quienes les agregan gomitas o alguna golosina para hacerlos más atractivos. Sin embargo, la propuesta de Betiana Morales fue pensando en aquellos que son team salado.
Betiana es la dueña de “Mil Suspiros”, la pastelería artesanal que comenzó a tomar forma hace seis años y desde entonces no dejó de crecer ofreciendo productos de calidad, cargados de sabor y originalidad. “Empecé a encontrar el amor por la pastelería y el deseo de poder cumplir con momentos memorables para mis clientes por medio de mis creaciones, lo que se volvió una pasión”, comenta la sanjuanina.
Una realidad con la se topaba cada diciembre le tocaba de manera personal. Betiana no tiene precisamente una fascinación por el pan dulce, por lo que comenzó a probar otras recetas con intenciones de llevarlo para el lado salado, y lo logró.
“Está pensando para aquellos que no son amantes del pan dulce. Es un pan salado, relleno de queso, paleta y salame. También tengo la opción saborizados y sin duda son buena alternativa para quienes no gustamos del pan dulce”, comenta.
La estrategia de marketing está bien pensada. En moldes y con la forma típica del pan dulce, la sanjuanina coloca su producto al lado de los panificados similares que tienen chocolate y fruta abrillantada. A simple vista, son similares, por lo que el cartel que indica “Pan Salado”, es el llamativo perfecto para que la gente se detenga y al menos movidos por la curiosidad pregunten sobre el producto.
Al respecto, Betiana comenta: “La gente se sorprende y ahí nomás se llevan uno, para probar aunque sea”.
Las propuestas de la pastelera se extienden de lo tradicional, apuntando a que una dulzura se convierta un regalo ideal. Es por ello que no solo ofrece productos panificados y de pastelería, sino también distintos box con un mix de productos, ideales para quedar bien con alguien amante de lo dulce.
Tanto sus panes dulces como salados y demás productos se pueden encargar con anticipación, con envíos a domicilio, comunicándose con Betiana al 2644599214 o al Instragram @pasteleriamilsuspiros.