Un acontecimiento que ha sido llevado al cine en numerosas películas de diversos géneros es el Holocausto. Conmemorando un nuevo aniversario de la liberación del campo de concentración Auschwitz, repasamos algunas propuestas cinematográficas, pasando por los clásicos de siempre y algunas novedades que podrían resultar interesantes.

La lista de Schindler (1993)

Oskar Schindler (Liam Neeson) es un integrante del Partido Nazi y dirige una fábrica de cocina en Polonia. La mano de obra de la fábrica proviene de uno de los campos de trabajos forzados del régimen nazi.

Oskar tiene la oportunidad de observar en primera persona lo que sucede en esos lugares, y en un acto de humanidad, decide no solo ayudar a los judíos, sino salvarles la vida. La historia se narra desde la visión de un nazi como de los judíos que sufrieron el Holocausto.

Héroes anónimos, huérfanos y duelos eternos se presentan desde la cobija del blanco y negro, metáfora de lo que se vive dentro de la cinta dirigida por Steven Spielberg.

La vida es bella (1997)

No llorar con esta película es utópico. Es una fábula casi mágica en la que un judío italiano busca, de todas las maneras posibles, proteger a su pequeño hijo de los horrores que se viven en el campo de concentración, simulando un juego perfecto en la fantasía de un niño.

La historia, escrita, dirigida y protagonizada por Roberto Benigni, narra de manera parcial la vida de Rubino Romeo Salmoni, un sobreviviente de Auschwitz.

Bent (1997)

Uno de los grupos perseguidos por el régimen nazi eran los homosexuales. Esta película permite un acercamiento a la temática relacionada con el Holocausto.

Narra la historia de un hombre que niega ser homosexual y se enamora de uno que orgullosamente admite serlo, todo dentro del campo de concentración. Cabe destacar que los judíos eran etiquetados con el color amarillo, y los homosexuales con el color rosado.

La película, basada en una obra teatral y dirigida por Sean Mathias, pone sobre la mesa temas como las humillaciones, el aislamiento y las ganas de vivir.

Sin destino (2005)

Narra la historia de un joven judío de 14 años de Hungría. Cuando avanzan las tropas nazis su padre es enviado a un campo de concentración y el joven queda solo con su madrastra, hasta que es detenido y enviado a Auschwitz.

Luego es transferido Buchenwald y finalmente a Zeitz. En cada lugar es testigo de los grandes horrores del Holocausto y de diferentes variedades de tortura, hasta que sus emociones comienzan a desaparecer.

La película se basa en la historia en primera persona del escritor húngaro Imre Kertész.

El niño con el pijama de rayas (2008)

La historia, basada en el libro que lleva el mismo título, gira en torno a dos niños, Bruno, hijo de un estricto comandante nazi que fue asignado a un nuevo puesto en el campo de concentración Auschwitz, y Shmuel, un niño judío que vivía en el campo de concentración.

Ambos se hacen amigos en un contexto donde solo son separados por un alambrado. Dirigida por Mark Herman, esta película te cautivará desde los primeros minutos y será imposible no sentir empatía e impotencia.

El guardián de Auschwitz (2019)

Hans es un arquitecto que es convocado por el partido nazi para trabajar en las instalaciones de Auschwitz, con el único objetivo de incrementar la efectividad de las cámaras de gas.

Estando adentro, asombrado por los planes de sus jefes, conoce a Helena, una mujer judía embarazada con quien desarrolla una relación protectora. Esta película muestra la horrible realidad que se vivía dentro de los campos, donde Hans arriesgará hasta su propia vida para salvar a la joven prisionera embarazada.

El guardián de Auschwitz fue dirigida por Terry Lee Coker.

BONUS TRACK

Jojo Rabbit (2019)

Si bien la historia no se desarrolla en el contexto de algún campo de concentración, fue interesante sumarla a la lista por el punto de vista que plantea.

Es una comedia delirante, donde un niño de la Alemania Nazi tiene como amigo imaginario a nadie más y nadie menos que Hitler. Muestra, desde la burla hacia el nazismo, el conflicto interno que mantiene el menor entre lo que representa la ideología nazi y lo que siente su corazón al descubrir una joven judía escondida en su hogar por su madre.

Taika Waititi, director de la película, deja en claro los absurdos de la guerra y el totalitarismo.