Ante diversas situaciones cualquiera puede sentir miedo o temor. Se refleja en el organismo cuando se paraliza el cuerpo, sientes que se hiela la sangre, la piel se vuelve crespita o el corazón te da “un salto” del susto. Pero cuando el miedo es más intenso, a niveles desproporcionados, se trata entonces de una fobia.

La fobia es un trastorno de salud emocional que se caracteriza por un miedo intenso. Puede surgir de manera súbita, donde la persona que la padece pierde el control de sus emociones y reacciones, e incluso transita una gran angustia en el momento. Las fobias pueden dividirse en dos categorías, las específicas que pueden ser de tipo animal, ambiental, situacional, sensación de daño entre otras; y las fobias sociales que interfieren con la rutina de la persona.

Hay algunas que son más conocidas, como la aracnofobia (miedo a las arañas), la agorafobia (a espacios abiertos), aerofobia (miedo a volar), claustrofobia (terror a los lugares cerrados) y muchas más; pero hay otras tan extrañas como raras y atípicas.

Fobofobia

Esta es sin duda una de las fobias más extrañas, ya que es la fobia a sufrir alguna fobia, lo que resulta un juego macabro mental para la persona que la padece.

Eufobia

Se trata del miedo a las buenas noticias. Las personas que padecen esta fobia siente un miedo irracional y por ello evitan afrontar situaciones que traigan aparejadas buenas noticias.  

Somnifobia

Es el miedo irracional ante el acto de dormir. La persona que lo sufre no le teme puntualmente a dormir, sino a que le suceda algo mientras lo está haciendo y no esté consciente para poder evitarlo.

Omfalofobia

Consiste en el pánico ante la visión, incluso a la idea del ombligo. El verdadero temor está relacionado al hecho de tocarlo. Acciones simples como tomar una ducha puede afectar a personas que presentan esta fobia.

Turofobia

Se trata del temor al queso, tanto al verlo, olerlo e incluso estar en la misma habitación donde hay cualquier tipo de queso. El motivo puede ser una experiencia traumática vivida en la infancia.

Onomatofobia

Temor irracional a ciertas palabras o nombres. Esta fobia puede detonarse por la asociación a situaciones negativas, problemáticas y/o traumáticas.

Trihexafobia

También conocido como “hexakosioihexekontahexafobia”, consiste en temerle al número 666. La cifra, identificado por algunas leyendas como la marca de la bestia, ha llevado a algunas personas a tenerle fobia a esta combinación de números, ya que lo toman como sinónimo de mal presagio.

Penterafobia

Consiste en el temor a la suegra. Aunque parezca no tener mucho sentido, hay personas que se enfrentan a altos niveles de ansiedad y estrés al estar con la madre de su pareja, lo que despierta esta fobia.

Falacrofobia

Aquellas personas que sienten angustia o ansiedad al ver una persona calva experimentan esta fobia. El temor se acrecienta con la simple idea de tocar la cabeza pelada de una persona o creer que puede quedar calvo o calva.

Enofobia

Es el miedo irracional hacia el vino. Quienes sufren esta fobia no pueden estar en lugares donde se almacena vino o donde están otras personas consumiendo esta bebida.