La historia dice que comenzó como una buena idea. Se fundó Slow Food como una asociación gastronómica alrededor del vino y la alimentación, en la pequeña localidad de Bru, en Italia, allá por 1996. Carlo Petrini, su mentor, tuvo como fin vital defender la buena alimentación, los placeres de la mesa y desarrollar un ritmo de vida más lento. Hoy el Slow Food tiene unos 85.000 socios, en 132 países, con sedes de importancia en Países Bajos, Australia, Reino Unido, Francia, Alemania, Suiza, Italia, Estados Unidos y Japón.
El movimiento se dedica a proteger los alimentos de alta calidad, los métodos de cultivo y transformación, como a defender la biodiversidad de variedades cultivadas y silvestres. También apoya las diferencias culturales territoriales, íntimamente ligadas a la historia alimentaria, y la cultura, para que puedan existir redes de intercambio recíproco equilibradas.
Comer es un "acto agrícola", es una nueva visión del mundo. Los consumidores, en la vida de los productores se convierten en verdaderos "coproductores" y para ellos los alimentos deben ser buenos, limpios y justos.
Uno de los objetivos de Slow Food es promover a diario la calidad agroalimentaria, que tiene repercusiones positivas en el estilo de vida, y en la salud de los individuos.
Terra Madre es una actividad de Slow Food para dar a conocer alimentos de calidad, de distintas comunidades, al mundo. Es un proyecto para apoyar las economías regionales, sostenibles en pequeñas dimensiones.
Es una red de 5000 productores de alimentos, de 1600 comunidades, con 1000 cocineros y 400 universidades de 150 países, que se dedican al arte de los alimentos. Trabaja para alcanzar un sistema de producción de alimentos respetuoso del planeta y con las personas que lo habitan. Cada 2 años se realizan estos encuentros, que tuvieron como inicio y en el Salón del Gusto de 2004 en Turín,
Luego, en el 2006, se hizo el Terra Madre II, con 9300 participantes, de los cuales 5500 eran pequeños artesanos productores, de un total de 160 países. Hubo 225 universidades, 2300 ONGs y numerosos chef famosos.
En el III, del 2008, se dedicó de lleno a los jóvenes. Se creó la Red de Jóvenes de Terra Madre. En estos encuentros, en pocos días se pueden conocer a pastores de Kenia y Siberia, a fruticultores de California y Perú, gente de la India y Sudamérica, que comparten comidas, opiniones, y tejen lazos de amistad.
Convivium
Los pilares constitutivos del Slow Food son los grupos locales autónomos llamados "Convivium". Estos cultivan el gusto por el placer culinario, reuniéndose con regularidad, para compartir comidas basadas en mesas con platos tradicionales, tejiendo lazos entre integrantes y educando el gusto luego en escuelas e instituciones.
En San Juan, en abril de este año se armó el Convivium Raíz de Cuyo, con Miguel Más a la cabeza, y Ariel Lucero como líder entre los jóvenes, también suman productores y artesanos de San Luis.
En el extenso programa, expusieron "Desarrollo económico, social y cultural de los pequeños productores de Pocito (San Juan)", a cargo de Miguel A. Más; sobre "El futuro del vino argentino", también "La relación sagrada del hombre con la tierra y su Sabiduría Ancestral", con María A. Beltrán Cionti y AMTA (Argentina Quiroga), guía espiritual Huarpe, y hubo exposición de artesanías autóctonas de Cuyo: cuero y metal, telar y tejidos; cerámica; pinturas con diseños autóctonos y artesanías en piedra, también música y danza cuyana, con organización de Convivium Raíces de Cuyo, de San Juan.
Delegación
Viajaron Ariel Lucero Reinoso, Alejandra Gil, Graciela Monton, Daniel Galdeano, Santiago Romera, Marcela Muñoz, Diego Gomez, Orgando Medina, Graciela Morales, Luis Morales, Daniel Saavedra, Néstor Sessa, Luciana Más, José Luis Sarmiento, Milena Pérez, Mauricio Gomez, Daniel Baez, Rocío Corrales, Alcira Nuñez, Myrian Welber, Claudia de La Vega, Gabriela Mini Lopez, Nahuel Sanchez, Patricia Adriana Mañe, Argentina Quiroga (AMTA), Javier Nuñez, Teresa de Miguel, Juan Carlos Arregui, María Asunción Beltrán Cionti y Miguel Angel Más.
Son elaboradores artesanales de tomate trirurado, quesos saborizados, vinos artesanales, espumantes, aceto y aceite de oliva, chocolates artesanales, tomates en confitura y almendras, productores de leche de vaca y quesos derivados, también artesanos en piedra y cerámica, cuero y metal, tejidos en telar y a mano, y tapices batik; van docentes de universidades, facilitadores creativos de Arte Sana, músicos, estudianets de gastronomía y gente de la comunidad huarpe.