Sheila Ayala, de 10 años, fue encontrada el pasado 18 de octubre estrangulada en un hueco donde los vecinos solían tirar basura en el barrio El Trujui de San Miguel. Por el crimen, fueron detenidos sus tíos Fabián González y Leonela Ayala. Una semana más tarde, otra nena, Estefanía Bonome, de 9 años, apareció muerta a metros de la estación de tren de José Mármol. El principal sospechoso, y quien confesó el crimen, fue su primo.

Un relevamiento de la organización La Casa del Encuentro confirmó que en lo que va de 2018 fueron asesinadas 13 nenas, una cada 20 días. Desde 2008 ya son 165 las víctimas de femicidios de hasta 12 años. Entre ellas, 33 bebas, de menos de 12 meses. En el 66% de los casos las víctimas tenían entre 19 y 50 años.

En 2011 y 2017 se registraron las cifras más altas de femicidios de niñas de entre 2 y 12 años, con 25 y 15 casos respectivamente. La mayoría de los asesinos tenían al momento del hecho entre 31 y 50 años.


Tal como pasó en los casos de Sheila y Estefanía, en la mayoría de los casos los femicidas son parte del círculo familiar. En un 75% de los asesinatos de mujeres de todas las edades fueron por parte de padres, padrastros, hermanos, tíos o parejas.

 

En más del 51% de los casos las víctimas fueron asesinadas en su propio hogar y una de cada cuatro fue asesinada por armas de fuego.

La provincia con mayor tasa de femicidios en los últimos 10 años fue Santiago del Estero, le siguen Salta, Jujuy y Misiones. Entre las que menos se registraron están la Ciudad de Buenos Aires, La Rioja y San Juan.