Una nena de Zanja Honda, en las afueras de Tartagal, Salta, sobrevivió a una operación de siete horas en la que los médicos le reimplantaron el brazo después de que se lo arrancara por meterlo en un viejo secarropas. En San Juan, en el año 2014, ocurrió un caso idéntico con un nene de 9 de Julio.

En un descuido de su familia, la beba de un año y ocho meses metió la mano en el viejo artefacto cuando estaba en funcionamiento su brazo fue arrancado desde el hombro por la fuerza centrífuga, informó el sitio El Tribuno de Salta. La madre de la nena, de apellido Saldaño, acudió con su hija al hospital Juan Domingo Perón de Tartagal con la ayuda de un vecino que las llevó -junto con el miembro cercenado- en su motocicleta.

Los médicos derivaron a la nena al hospital Materno Infantil de Salta donde la operaron este miércoles tras lo cual "evoluciona favorablemente" a pesar de haber perdido mucha sangre, informó el sitio ET.

El médico que la operó fue el especialista en microcirugía Paul Coronel Gómez, quien afirmó que las próximas horas serán decisivas para saber si la nena podrá usar su brazo reimplantado.

"Es sumamente emocionante tener la posibilidad de salvarle el brazo a una beba de poco más de un año y de mejorar, tanto sus posibilidades como su calidad de vida", expresó Coronel Gómez.