La elección provincial en Córdoba fue un verdadero "mazazo" para el radicalismo local. El peronismo se impuso con amplio margen con la reelección del gobernador Juan Schiaretti y además le arrebató la intendencia de la capital a la UCR, que fue dividida por el enfrentamiento entre Mario Negri y Ramón Mestre. Frente a este duro revés el histórico dirigente radical Federico Storani consideró que los resultados fueron "una tragedia política" para el centenario partido.

Como explicó el periodista y analista político Ignacio Zuleta en TN.com.ar el quiebre de Cambiemos a nivel provincial fue una de las claves de la contundente victoria de Schiaretti, sumado a la unión del peronismo. "Los bastoneros de Cambiemos pierden porque se dividieron", consideró Zuleta.

"El proceso previo a la elección fue desgraciado, lleno de desinteligencias que pudieron haberse evitado. Era difícil ganar la elección unidos y mucho más difícil divididos", explicó el dirigente, en una fuerte autocrítica tras el "cachetazo" electoral en la provincia mediterránea. "Lo que ocurrió en Córdoba es una tragedia política para el radicalismo", afirmó.

Para Storani el duro revés que sufrió el radicalismo fue "un voto castigo por todo el proceso" previo a las elecciones por el enfrentamiento entre el jefe del interbloque Cambiemos en Diputados y el intendente de Córdoba, que derivaron en el estallido del frente a nivel local.

"Es un golpe muy duro para el radicalismo, en una provincia con una historia poderosa. Además, en cierto modo se ratificó ese sentido de identidad en elecciones municipales pero esto es otro tema. Hay una suerte de castigo al proceso", insistió.