Alto perfil. El fallecido fiscal Alberto Nisman tenía 51 años, estaba separado de la jueza federal Sandra Arroyo Salgado, tenía dos hijas, y mostró durante los últimos años un alto perfil político.

La Cámara Federal porteña sostuvo ayer que el fiscal especial del caso AMIA, Alberto Nisman, fue "asesinado" y que su muerte fue "directa consecuencia" de la denuncia que le hizo a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner por el supuesto encubrimiento de los iraníes acusados por el atentado a la mutual israelita.

El fallo, de la Sala II del tribunal de apelaciones, fue firmado por el camarista Leopoldo Bruglia y su colega de la Sala I, Martín Iruruzn, los únicos dos magistrados que integraban ayer la Cámara Federal porteña.

"Se encuentra prima facie acreditado que Natalio Alberto Nisman fue asesinado y que dicho suceso fue directa consecuencia de la denuncia que formulara el 14 de enero de 2015 como titular de la Unidad Fiscal de Investigación del atentado terrorista perpetrado contra la sede de la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina)", sostuvo Irurzun en su voto.

"A partir de la prueba reunida, su concreción resultó posible a partir del despliegue de una correlativa logística que debió contar necesariamente con la cohesión de diversas voluntades orientadas a la concreción con éxito del plan urdido", remarcó el magistrado.

Tras esas afirmaciones, los camaristas le ordenaron al juez de la causa, Julián Ercolini, que profundice la investigación para intentar determinar quiénes pudieron estar detrás de la muerte del fiscal, aunque no le hicieron lugar al pedido del abogado Pablo Lanusse (representante de la madre de Nisman) de imputar a la expresidenta.

Irurzun y Bruglia no mencionaron en su fallo a la exmandataria y actual senadora nacional ni a ninguno de los exfuncionarios investigados por la firma del memorándum de entendimiento entre Argentina e Irán en el marco de la causa AMIA, hecho que para Nisman se trató de una maniobra de encubrimiento.

En el mismo fallo, los camaristas confirmaron los procesamientos de los custodios de Nisman que están acusados de haber cometido incumplimiento de sus deberes al no haber evitado la muerte del fiscal y también por los delitos de encubrimiento.

Quien no había apelado el fallo de Ercolini fue el técnico en informática Diego Lagomarsino que seguirá procesado como "partícipe necesario" del homicidio de Nisman, bajo la sospecha de que su misión fue aportar un "arma amiga" a la escena del crimen.

Nisman apareció muerto en el baño de su casa de Puerto Madero, en la ciudad de Buenos Aires, el 18 de enero de 2015, cuatro días después de denunciar a la expresidenta y a otros miembros del gobierno pasado: tenía un balazo en la cabeza que había salido del arma a nombre de Lagomarsino.

Al emitir su fallo de ayer, los camaristas Bruglia e Irurzun valoraron que Nisman apareció muerto pocas horas antes de que llegara el día en el que se presentaría, de manera voluntaria, en el Congreso para brindar detalles sobre su denuncia contra la exmandataria.

Al momento de morir, el procurador llevaba casi 20 años participando de la investigación del atentado contra la mutua judía AMIA de Buenos Aires, que dejó 85 muertos en 1994, sigue impune y que la comunidad judía atribuye a Irán y al grupo terrorista chiita Hezbollah. Nisman aseguraba que, a cambio de mejorar la relación comercial con Irán, el Gobierno pretendió encubrir a los sospechosos del ataque. Télam y Efe