Señor director:

Los argentinos tenemos mujeres y hombres, próceres de quienes sentirnos orgullosos, pero nunca tuvimos un hombre a quien todo el mundo respeta, llora y homenajea a la hora de su partida. El papa argentino, descendiente de italianos, Francisco, es en estos momentos llorado por el mundo entero, mientras que los líderes de todas las naciones reconocen y se arrodillan ante su alma en la partida hacia la casa del Señor. Gracias padre Jorge por tu tarea pastoral y gracias por ser el argentino más importante de nuestra joven historia como nación. Riposa in pace.

Arturo Curatola
Empresario
Cámara de Comercio
Italo-argentina