Técnicos del Gobierno tomaron hoy muestras de agua en el río Confuso para averiguar la causa de la alta mortandad de peces registrada en los últimos días, y si está provocada por desechos de las fabricas asentadas en la zona, en el Chaco paraguayo.

Miles de peces aparecieron muertos al paso de ese cauce, afluente del río Paraguay, por los alrededores de la ciudad de Villa Hayes, donde siguen flotando y en estado de descomposición.

Desde la Secretaría del Ambiente (SEAM) informaron a Efe que la cifra de peces podría alcanzar los 5.000, todo ellos de porte medio
y correspondientes a especies de ese río, como el surubí. Darío Mandelburguer, director general de Protección y Conservación de la Diversidad, dijo que las muertes, de las que se tuvo conocimiento el viernes, se produjeron por falta de oxigeno y de una sola vez.

Un equipo de técnicos de la SEAM realizó esta mañana mediciones de los parámetros básicos del estado del agua como el nivel de
potencial de hidrógeno y temperatura. Al mismo tiempo recorrieron los alrededores para estudiar posibles intervenciones en las fábricas e industrias existentes y determinar si tuvieron responsabilidad en la muerte de los peces.

En ese sentido, Mandelburguer, explicó que en la zona operan fábricas de curtientes, de alimentos para mascotas, así como explotaciones avícolas. Por su parte, el titular de la SEAM, Rolando De Barros, manifestó que esas industrias se exponen a fuertes sanciones si las muestras
confirman que las aguas fueron contaminadas por residuos arrojados al río.

‘Desde la SEAM vamos a brindar todos los datos necesarios para remitir a la Fiscalía del Medio Ambiente con el propósito de procesar e imputar a los responsables de esta situación‘, dijo De Barros, citado en la página de la SEAM.