Buenos Aires.- El pequeño llamado Aryeh, visitó el zoológico de Atlanta, Estados Unidos, junto a sus padres cuando logró interactuar con los enormes leones. El enorme felino queda perplejo al ver al pequeño moverse de un lado a otro con el traje de león.

 

Según contó su madre a través de YouTube, su hijo de sólo 11 meses ni se inmutó al estar de frente al “rey de la selva”. A diferencia de otras veces, el león no se mostró agresivo y sólo agitaba sus patas en el vidrio que lo separaba del bebé.