El hecho sucedió en la provincia de Guandong, en China, cuando un delincuente se daba a la fuga en una moto tras robar a un conductor su teléfono celular. La víctima no pudo alcanzarlo y todo parecía indicar que no recobraría su pertenencia.
Ese mismo día, el hombre volvió al lugar donde había sido víctima del delincuente sin imaginar que lo volvería a encontrar. Así, cuando lo identificó el ladrón intentó huir pero fue derribado por el hombre cuando saltó sobre él.
La víctima del ladrón recobró su teléfono y el ladrón fue detenido y denunciado ante las autoridades locales.
