El cura Horacio Corbacho y el empleado del instituto Próvolo José Luis Ojeda fueron trasladados al pabellón 5 de Boulogne Sur Mer, conocido popularmente como "el pabellón de los violadores". Allí hay hombres detenidos por agresiones sexuales y femicidios, como el asesino del barrio Trapiche, Daniel Zalazar.
 

Desde el penal indicaron que no se ha reforzado la seguridad ante el ingreso del sacerdote y del empleado de la institución de Luján, debido a que la estructura "ya está preparado justamente para proteger la integridad de las personas detenidas allí".
 

Por su parte, el sacerdote Nicola Corradi (82), quien ya contaba con antecedentes de abusos en el instituto Próvolo de Verona, continúa detenido en Contraventores a la espera de una resolución sobre la eventual prisión domiciliaria, debido a su avanzada edad.
 

Tampoco se ha determinado aún si Jorge Bordón, quien era monaguillo de la institución y a la vez hacía tareas administrativas, y el jardinero Armando Gómez terminarán encerrados en el pabellón 5 de la cárcel. Cabe remarcar que Ojeda, Bordón y Gómez son hipoacúsicos.