Asegurar el abastecimiento del San Juan de hoy y de las próximas generaciones fue la finalidad de la puesta en marcha ayer de la Estación Transformadora (ET) Nueva San Juan 500/132 kV, que tuvo un costo de 640 millones de pesos. De ese total, la Provincia aportó el 55%, incluidos recursos que acercó la minera Barrick, y el 45% restante corrió por cuenta del Gobierno nacional.
En un predio de 22 hectáreas, en Calle 5 y Pellegrini, en la zona de La Bebida, Rivadavia, se levanta la obra que fue iniciada en diciembre de 2013 y se concluyó ahora y que asegurará la provisión eléctrica a la provincia, aún cuando se vea interrumpida la generación local de los diques.
La ejecución de los trabajos estuvo a cargo del EPRE y la empresa constructora fue José Cartellone Construcciones Civiles, con equipos provistos por Toshiba Infraestructura, de Brasil, Siemens y AIT Arteche.
Para el corte formal de la cinta acompañaron al gobernador Sergio Uñac el secretario de Energía Eléctrica de la Nación, Alejandro Sruoga; el presidente de EPRE, Jorge Rivera Prudencio; los ministros de Planificación Julio Ortiz Andino y de Minería, Alberto Hensel; legisladores e intendentes, entre otras autoridades.
Usuarios
El constante crecimiento de los usuarios del servicio eléctrico, que pasaron de 144.000 en 1997 a unos 230.000 en la actualidad, ha motivado la realización de obras para atender la demanda que generan.