El viento ayer le jugó una mala pasada al personal que trabaja en el autódromo, pero no pudo con quienes están enfocados en el centro médico. Allí apenas restan trabajos de pintura e instalar algunos equipos, por lo que ya es posible tomar la dimensión que tiene el lugar, una verdadera perla dentro de la megaobra que es el Circuito San Juan Villicum, que será inaugurado el jueves y que desde el viernes tendrá la presentación del Mundial de Superbike.

El llamado Medical Center es un microhospital de alta complejidad, preparado para asistir traumas de gravedad y que cuenta con hasta dos helipuertos.

Es un área sensible en la organización porque un piloto de motociclismo está más expuesto al riesgo de sufrir lesiones severas en caso de accidentes que, por ejemplo, un corredor de automovilismo. Por eso, una clínica de alta complejidad fue uno de los aspectos claves para lograr la homologación de la Federación Internacional de Motociclismo y la de Automovilismo.

El Medical Center está provisto de una sala de rayos X, dos de shock room (atención primaria del paciente) con aparatos de oxigenación y aspiración, salas de recepción y enfermería y dos habitaciones con cuatro camas que por equipamiento se convierten en terapias intensivas. El complejo cuenta hasta con un sector de atención al quemado, que en su zona media tiene una bañera sobre la que se desprende un aparato con mangueras con agua.

"Estamos trabajando en los últimos retoques y en la instalación progresiva del equipamiento. Es una obra muy compleja y requiere además de mucha capacitación. Sólo dentro del Medical Center trabajarán entre 10 y 12 personas durante el evento", indicó la ministra de Salud Pública, Alejandra Venerando.

Pero además, el personal afectado al operativo sanitario en todo el autódromo alcanzará las 140 personas, a la vez que 36 scouts serán voluntarios y avanzarán entre el público atentos a cualquier eventualidad para dar aviso a los especialistas.

Los profesionales vienen trabajando desde hace un tiempo y el plan de trabajo, grosso modo, se basa en tres grupos conformados en base a hipótesis de riesgo. Así, abarcan específicamente a la asistencia en carrera y a sus pilotos en pista; a todos los asistentes dentro del perímetro del autódromo; y a la coordinación de esos dos con el trabajo de emergencias de la provincia. Habrá equipos a pie, en ambulancias y en autos de intervención rápida en la pista. Así, si por ejemplo un piloto sufre un siniestro será asistido en el circuito y eventualmente derivado al Medical Center, donde será estabilizado y recibirá el tratamiento inicial y/o definitivo, explicó Matías Espejo, subsecretario de Medicina Preventiva. En caso de una evacuación, no se hará por ruta sino por helicóptero. El centro médico de El Villicum tiene dos helipuertos y estarán conectadas con el que se inaugurará el jueves en el Hospital Rawson, adelantó Venerando.

Especialistas
 

El Medical Center del autódromo El Villicum precisa no sólo de ciertos aspectos edilicios y de equipamiento, sino también de determinadas especialidades de profesionales de la salud. Así es que debe contar con cirujano de trauma, médicos intensivistas, traumatólogos y especialistas en quemado, tanto en médicos con en enfermería.