Independiente se convirtió anoche en el último equipo argentino clasificado para los octavos de final de la Copa Libertadores, instancia a la que accedieron todos sus compatriotas, tras vencer como local a Deportivo Lara, de Venezuela, por 2 a 0, y finalizar segundo en el Grupo G.

De esta manera el Rojo se sumó a River (el único argentino que finalizó primero en su grupo), Boca, Racing, Estudiantes de La Plata (ver aparte) y Atlético Tucumán.

Para lograrlo Independiente cumplió ayer con su obligación de ganarle a Deportivo Lara, con el que había perdido en el debut en Venezuela, lo que le permitió aventar cualquier riesgo de que se registrara algún resultado "inconveniente" en el cotejo que finalmente el líder Corinthians perdió 1 a 0 con Millonarios, de Colombia (gol de César Carrillo), el conjunto dirigido por el argentino Miguel Ángel Russo que accedió a la Sudamericana.

El cuarto de hora inicial del partido encontró a los venezolanos manejando mejor la pelota que Independiente, con prolijidad en la salida pero falta de profundidad, mientras que los dirigido por Ariel Holan intentaban presionar en tres cuartos de cancha.

Pero lo que no podía con la pelota al pie y luego de un remate en el travesaño de Martín Benítez (tuvo tres a lo largo del partido), el misionero logró abrir el marcador con un gol olímpico tras lanzar un córner desde la izquierda a los 37 minutos del primer tiempo.

Gol que tranquilizó los ánimos de cara a la segunda mitad, en la que las características del juego no se modificaron hasta la media hora, con Independiente llegando mucho pero fallando siempre en la última puntada.

Pero cuando Holan y los hinchas de Independiente empezaban a inquietarse llegó una notable triangulación entre Benítez, Meza y Emanuel Gigliotti concluyó con una gran definición del "Puma" que tranquilizó a todos y selló la clasificación a 10 minutos del final.