‘Veníamos bien. Y no vi al perro. Todo fue de repente, no tuve tiempo de frenar. Yo sentí el golpe y recién ahí vi al perro, creo que era blanco. No sé qué pasó después porque me desvanecí, me desmayé. Sólo recuerdo que me subían a una ambulancia y que yo decía: ¿mi señora? ¿cómo está mi señora? Y me dijeron que no me haga problema, que se la habían llevado a otro lado’, relató Mauricio Oviedo.
El obrero rural no lo sabía, tampoco se lo quisieron decir en ese momento, pero el choque con el animal había tenido consecuencias fatales. Adriana Lucía Brizuela, su mujer, había perdido la vida en el mismo lugar del accidente.
La tragedia ocurrió el viernes a la noche sobre la calle Paraguay, entre la ruta 183 y calle 11, en el distrito La Majadita, 9 de Julio. Adriana Lucía Brizuela, una ama de casa y cosechadora de 39 años, murió producto del duro golpe contra el pavimento a pesar de que llevaba casco. Oviedo, en cambio, sufrió golpes y raspones y ayer en la mañana ya estaba en su casa esperando poder velar los restos de su mujer, con quien vivía a 3 km al Sur de donde se produjo el siniestro.
Los perros andan sueltos y nadie se hace cargo. Ahora, quién me devuelve mi mujer
Mauricio Oviedo – Pareja de la mujer fallecida
Mauricio Oviedo contó que 10 días atrás había hecho una exposición en la comisaría justamente por los perros que andan sueltos por esa zona. Por esas cosas del destino, el viernes a la noche se cruzaron con uno de esos animales. El obrero y su señora volvían en su Maverick 110cc de comprar mercadería en la villa de 9 Julio y se dirigían a la casa que les prestan, en una finca de calle Paraguay cerca de 14. Fue a mitad del trayecto cuando tuvieron el terrible accidente a raíz de que se les atravesó ese perro galgo.
La moto traía la luz baja y Oviedo no vio al animal sino hasta que lo impactó violentamente con el rodado. Él no se acuerda qué pasó después. Los policías de la Seccional 11ma explicaron que aparentemente la moto recorrió unos 20 metros arrastrando al animal y la pareja voló contra el pavimento. Brizuela no sobrevivió al golpe. Ahora, la Policía trata de establecer a quién pertenecía ese animal.