En el marco de su política habitacional, la gestión uñaquista armó un plan inédito para la clase media. Las familias inscriptas en el padrón del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) que cuenten con un sueldo desde los 19 mil hasta los 38 mil pesos entrarán a un sorteo para quedarse con casas con mejores terminaciones y detalles, acordes con la cuota que puedan pagar. En el Gobierno ya tienen destinadas unos 1.100 hogares en terrenos que ha comprado en Rivadavia y Rawson, cuyas localizaciones se mantienen en reserva. El objetivo es encarar las licitaciones dentro del segundo trimestre para que las constructoras ganadoras inicien los trabajos a fines de este año o comienzos del 2019 si se cumplen todos los pasos, de acuerdo a las previsiones oficiales.

Hasta ahora, los interesados con ingresos económicos que pueden pagar una cuota tranquilamente forman parte del padrón general y participan de los sorteos que se hacen sin ningún tipo de distinción. "De los 42 mil inscriptos, hay de todos los estratos. Por eso tenemos que armar planes que respondan a las necesidades y a la capacidad de pago y a la posibilidad de la gente", resaltó Juan Pablo Notario, interventor del IPV. De esa manera, el Ejecutivo apunta a zanjar el déficit habitacional sin descuidar a ningún sector y a utilizar un mecanismo solidario y que sea capaz del recupero de lo invertido para seguir generando viviendas.

En ese marco, también están contempladas operatorias para el resto de los anotados, ya que desde el IPV trazaron un esquema, indicó Notario, quien explicó que el marco de referencia es el Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM). Para aquellas familias que perciban un monto equivalente a un SMVM, que hoy está en 9.500 pesos, habrá casas de tipo sociales, "de excelente calidad y que cumplen con todos los estándares y normas antisísmicas, pero que tienen menos detalles en pintura, piso y cerámicos, por ejemplo", explicó el funcionario. En ese ahorro, el costo de las mismas es de 700 mil pesos. Luego estará un lote de inscriptos, cuyos sueldos vayan de 9.500 a 19.000 pesos, que podrán acceder a las tradicionales casas del IPV, con la posibilidad de ampliación. Para ambos grupos estarán disponibles 1.900 casas, en partes iguales, a licitar también en este primer semestre. Y por último está el cupo para la clase media, que comprenderá a los titulares desde dos hasta cuatro SMVM (de 19.000 a 38.000 pesos). Para llegar a estos cálculos, la repartición está llevando a cabo el reempadronamiento, el cual finalizará el 16 de marzo. Cuando esté listo, cruzarán datos con el sistema Sigebe, que permite establecer si una persona cuenta con una vivienda en otro punto del país, y con AFIP, para corroborar cuánto gana.

Para financiar las casas de clase media, la repartición viene avanzando en una Asociación Público Privada. Esto es, la constitución de un fideicomiso que administre el Banco San Juan, el cual se fondeará, en principio, con aportes de la Nación, que se están gestionando, y de la provincia. Así, será la entidad la encargada de entregar los créditos a los beneficiarios y de cobrar las cuotas, explicaron en el Gobierno. Las otras líneas tienen otra fuente de financiamiento (ver aparte).

En cuanto a los detalles de las viviendas, estas serán bajo el nuevo prototipo que diseñó el IPV. Las mismas contarán con ampliaciones calculadas, lo que brindará la posibilidad de pasar de una casa de 57 metros cuadrados a una de 120, con baño en suite, un tercer dormitorio y una galería que pueda funcionar como cochera para dos autos.

• Vivienda social

Según explicó Notario, los fondos para viviendas sociales saldrán de la provincia, del Lote Hogar y del Fonavi. La inversión en ese tipo de hogar es más económica, ya que cuesta 700 mil pesos. Así, le da chances al adjudicatario de pagar una cuota más accesible.

• Segundo grupo

El plan es que dos tercios sea aportado por Nación y el resto, por la provincia. Como el IPV viene negociando con el macrismo la deuda por casas que mantiene con San Juan, la idea es hacer un convenio para que lo adeudado sea un crédito para esta línea.

• Asociación

El objetivo es la creación de un fideicomiso que administrará el Banco San Juan. Lo fondeará, en principio, una parte Nación y el resto, la provincia. La entidad entregaría el crédito al beneficiario y se encargaría de cobrar las cuotas.