Luego de las declaraciones de Alejandra Perona, presidenta de la Unión Vecinal Manuel Belgrano de Albardón, sobre supuestas irregularidades en el servicio de agua potable tras la finalización del gerenciamiento provisorio por parte de OSSE, la empresa estatal salió al cruce con fuertes definiciones y precisiones técnicas.
José Parra, jefe del área Legal de Obras Sanitarias (OSSE), aseguró que el origen del convenio, vigente de forma discontinua desde 2013, se dio en un contexto de “absoluto abandono” del servicio por parte de la unión vecinal. “El agua era literalmente negra, estaba podrida. La planta era inoperativa, los trabajadores no contaban con equipamiento ni protección. OSSE debió intervenir por una cuestión sanitaria y en beneficio de la comunidad, no por conveniencia empresarial”, afirmó en diálogo con Diario de Cuyo.
Según Parra, el último convenio de gerenciamiento vencía en abril de 2024, con una cláusula de renovación automática, pero también con la posibilidad de rescisión anticipada con 60 días de preaviso. “El 24 de junio reclamamos la deuda, que no se abonó, y el 5 de agosto enviamos carta documento notificando la decisión de no renovar, en medio de incumplimientos de la unión vecinal, entre ellos una deuda reconocida de $37 millones. Además, enfrentamos reclamos judiciales de empleados de la propia unión vecinal y hasta del abogado de ellos contra OSSE”, detalló el funcionario.
En ese marco, el 5 de agosto se formalizó la notificación del fin del gerenciamiento. Sin embargo, de acuerdo con las declaraciones de Parra, la entidad vecinal recién respondió el 15 de septiembre, a 40 días del aviso, cuando solo restaban 20 para completar el plazo legal. “Eso muestra quién actuó fuera de tiempo”, cuestionó.
Respecto a los cobros denunciados por Perona, OSSE explicó que el sistema de facturación se maneja a mes vencido. “El servicio seguía siendo brindado por OSSE hasta ese momento, con nuestros insumos y personal. Por eso se facturó septiembre”, explicó Parra.
En su respuesta, OSSE también defendió el trabajo realizado durante los años de gerenciamiento. “Hicimos una fuerte inversión: se reemplazaron filtros, se amplió la red, se incorporaron perforaciones. A valores actuales, esas obras rondan los $1.000 millones y serán entregadas a costo cero para la unión vecinal, porque OSSE se hizo cargo de todo”, afirmó Parra.
Además, adelantó que en el transcurso de la próxima semana se hará entrega formal de la administración, junto con el padrón de usuarios, de alrededor de 3.700 cuentas activas, y el estado de deuda.
En relación con las críticas por falta de información, Parra fue categórico: “Perona reconoce que durante más de 10 años OSSE hizo reparaciones e inversiones. Ahora que debe asumir la gestión, muestra preocupación, pero durante ese tiempo estuvo desentendida incluso de las demandas laborales de sus propios empleados”.
Finalmente, el funcionario subrayó que todo lo entregado estará en mejores condiciones que lo recibido. “Nos hicimos cargo de una planta inoperativa y vamos a entregar una planta operativa, ampliada, mejorada y con mayor capacidad”, concluyó.

