Todo aquel que haya nacido en San Juan tiene en claro de qué se trata vivir en la tierra del Sol y por ende, sabe qué es esa honrosa sensación de ser el punto "más caliente del país" cada vez que los cuarenta grados y más se apoderan del termómetro. Claro que hay lugares donde el clima no es tan riguroso. De hecho, hay sitios en el planeta dónde los 365 días del año se viven bajo el cobijo de tenues rayos del sol, luciendo ropa liviana y tomando bebidas frescas para mitigar los grados centígrados que superan la media tolerable de sensación térmica. Allí los días son más largos y las horas de luz son aprovechables al cien por ciento. Generalmente tienen como marco paisajístico, el mar y la playa o al menos un río como complemento de las cuestiones climáticas.


Y vaya si será placentero ser ciudadano de esas ciudades o al menos tener la posibilidad de ser visitante en cualquier momento del calendario.


Lo que sigue es un listado de algunos destinos donde se vive en verano, literalmente hablando, descontando la fantástica Aruba en el Caribe, Ecuador, Costa Rica, Playa Blanca en el norte de Panamá y Hawai.
 

Santa Cruz de Tenerife (España)


La ciudad puerto ubicada en Tenerife, en las Islas Canarias, es más conocida como "la isla del eterno verano". Además de tener edificios muy bien conservados de diferentes épocas como la Iglesia de la Inmaculada Concepción o el Palacio de Carta y hermosas playas para todos los gustos, el lugar es muy conocido por su carnaval declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional, considerado uno de los más famosos del mundo. Allí la temperatura media anual de 23º C y es una de las zonas de España más cálidas. Por eso es uno de los destinos de sol y playa más solicitados para viajar en pareja o con la familia.


Otro sitio clave para disfrutar del buen clima en las Islas Canarias es Fuerteventura, la segunda isla más grande, que se encuentra a 100 kilómetros de la costa norte de África. Es un destino de vacaciones muy conocido por sus playas de arena blanca y su clima cálido con brisas marítimas. Es zona de acantilados y las caletas, famosa por ser el escenario de deportes acuáticos como surf, el windsurf y el esquí acuático. Vale la pena visitar las playas del Parque Natural de Corralejo, la de Caleta de Fuste, La Concha de la isla de Lobos y, sobre todo, las de la zona de Jandía.


Miami (Estados Unidos)

Por algo será que a esta ciudad del extremo sureste de Florida se la llama la "Ciudad del Sol". El mejor sustento que tienen para ello es el clima agradable y la temperatura media anual de entre 25 y 28º. Es por eso que allí hay turistas todo el año, especialmente entre enero y abril, que además del cálido sol, disfrutan de un ambiente prácticamente sin lluvias.


Los mayores atractivos del lugar para los viajeros son por supuesto las aguas turquesas de Bahía Vizcaína y las playas blancas de Miami Beach, donde además se encuentra el glamoroso barrio, afamado por los coloridos edificios de art decó, los hoteles y restaurantes junto al mar, los clubes para todos los gustos y las exclusivas tiendas de moda.

La segunda ciudad de Estados Unidos que promete mucho sol y algo de humedad durante todo el año (en invierno, la temperatura media es de 16º C) es Los Ángeles, meca de las playas para todo tipo de viajero, como Venice, con la vida desfilando en su Ocean Front Walk; Santa Monica, la preferida para hacer deporte y Malibú, paraíso de surfistas y la playa familiar por excelencia de "la ciudad que nunca se acaba", como le dicen sus propios habitantes.


San Francisco es otra ciudad de Estados Unidos para disfrutar todo el año. Recomiendan pasear por este destino repleto de barrios con personalidad propia: el barrio bohemio de Haight-Ashbury, las calles de North Beach en las que reinaba la generación beat, los exclusivos Russian Hill y Nob Hill, la colina más exclusiva, Chinatown o el Castro, la capital gay del mundo, sin olvidarse del Fisherman's Wharf y la isla de Alcatraz, por supuesto.
 
 
Sydney (Australia)


Una de las ciudades más cosmopolitas del mundo pero también, una de las más caras del planeta y a su vez, una de la que tienen los mejores estándares de vida, también ostenta buen clima, con más de 340 días de sol al año. El clima templado reina durante todas las estaciones y por eso, la capital del estado de Nueva Gales del Sur, al sureste de Australia, aprovecha al máximo la amplia bahía de Sydney (Puerto Jackson) para dar opciones al turista. Imperdibles: la Casa de la Ópera, el puente de la bahía y sus playas, pero también los múltiples parques nacionales que contienen bahías y ríos (especialmente el Parque Nacional Real), el jardín botánico y el puerto que reciben millones de visitantes cada año.
 
 
Bangkok (Tailandia)


En este lugar es verano desde el 1º de enero al 31 de diciembre, lo que permite que tanto de día como de noche se viva con mucha intensidad. Quizás esa sea la razón por la que hay tanta oferta gastronómica, desde restaurantes exclusivos a puestos callejeros a cada paso dónde se puede probar los platos típicos de la cocina thai. Es el lugar ideal para vivir sensaciones nuevas, propias de una cultura milenaria, tan diferente a la occidental.


Si se elige viajar, hay que tener en cuenta que de mayo a octubre es la época de lluvias o monzones, que dificultan un poco, el recorrer los miles de santuarios, templos, palacios y museos de la llamada la "Aldea de la ciruela silvestre". Bangkok es un verdadero centro político, social y económico no sólo de Tailandia, sino de Indochina y el Sudeste asiático.


En Tailandia también es interesante llegar a Phuket que no sólo es la isla más grande del país sino que alberga la espectacular bahía de Phang Nga. En esta zona hay decenas y decenas de islas que parecen que surgen como arte de magia en un mar de aguas transparentes y de colores como el aguamarina, turquesa o esmeralda. Paradisíaco.
 
 
La Habana (Cuba)


Como lugar caribeño que es, en La Habana, el verano habita todo el año, pero además toda Cuba tiene ese encanto especial que ofrecen sus habitantes, su música y su historia, lo que sin lugar a dudas, lo convierten en un destino más que promisorio. Es bueno saber que la mejor época para viajar son los meses de invierno en los que el calor se apacigua un poco y permite disfrutar de la ciudad sin el agobiante sol de pleno verano.


Para quién disfruta de las playas, aquí sobran las playas de aguas turquesas, arenas blancas y aguas cálidas con temperaturas que rara vez bajan los 24 grados. Para quienes buscan otras opciones, La Habana tiene mucho para ver: arquitectura colonial española en el centro de la Habana Vieja del siglo XVI, incluyendo el Castillo de la Fuerza Real, un fuerte y un museo marítimo, el edificio del Capitolio Nacional (que es un monumento icónico de la década de 1920), la catedral barroca de San Cristóbal y la Plaza Vieja. También hay que sí o sí visitar la zona del famoso Malecón, entre otros puntos de la ciudad.
 
Madeira (Portugal)


Vale aclarar que aquí es primavera todo el año, más que verano porque nunca llega a hacer un calor agobiante. Pero lo que sí es más que seguro es que es el sitio perfecto para combinar playas con una naturaleza salvaje (visitando por ejemplo los bosques de Laurisilva y las impresionantes piscinas volcánicas de Porto Moniz además de los acantilados, cañones y zonas montañosas); con el encanto urbano de Funchal, su capital (con su Mercado de Lavradores, su catedral y sus famosas bodegas) y los muchos destinos con dejos de historia, como los pueblos pesqueros y su anecdotario popular. Madeira es una región autónoma de Portugal, es un archipiélago de 4 islas frente a la costa del noroeste de África.


La emperatriz Sissi, el emperador Carlos I de Austria y Winston Churchill, entre otros, elegían este lugar para alejarse de las rutinas. Ahora son miles de turistas los que disfrutan de su calidez.


  
Filipinas

Este país tropical donde además de sol lamentablemente hay días con muchas lluvias y hasta tifones- tiene más de 7.000 islas, en pleno Pacífico Occidental, para descubrir. Tiene kilómetros y kilómetros de playas en las que el tiempo pasa entre la posibilidad de tumbarse a tomar el sol, bucear, hacer deportes acuáticos y ver cómo pasan las horas admirando el horizonte. Como si fuera poco, Filipinas es uno de los 10 países del mundo con mayor biodiversidad, por lo que las excursiones no tienen por qué limitarse sólo a las costas o a la magnífica isla de Boracáy, sino que también se puede contemplar maravillas de naturaleza como el Parque nacional del río subterráneo de Puerto Princesa o los arrozales en terrazas en Banaue. Un dato más: a Filipinas es considerado el país de las sonrisas porque sus habitantes son por demás de simpáticos, hospitalarios y cálidos.


Río de Janeiro (Brasil)


Muchas son las razones por las cuáles a Río de Janeiro, la segunda ciudad más grande de Brasil se la conoce como "cidade maravilhosa": es la cuna del carnaval, además de escenario de sitios paradisíacos como las playas de Copacabana o Ipanema, el Pan de Azúcar y el extraordinario panorama que regala a la vista o el Cristo Redentor cuya estatua domina el Corcovado. También enamora el Museo de Arte de Río (que integra un palacete de estilo señorial inglés con un edificio de diseño modernista), el barrio centro y la zona portuaria, el Palacio Imperial, el Teatro Municipal, los Arcos de Lapa o la Iglesia de la Candelaria, entre otros. Con temperaturas agradables y lluvias escasas, aunque en verano las dos condiciones climáticas se exacerban un poco, siempre es buen momento para disfrutar del relax de las playas y la ciudad, con una deliciosa caipirinha.


Natal, Natal, la capital del estado de Río Grande de Norte, también es un buen lugar para el eterno verano. Es famoso por sus playas y por ser la puerta a ese collar de perlas que es el archipiélago de Fernando Noronha, escondite de famosos en busca de intimidad. Las playas de la ciudad están consideradas entre las mejores del continente: destacan de todas ellas la de Bahía de Punta Negra y las playas de Pipa, un antiguo poblado de pescadores cercano a la ciudad.
 


Islas Seychelles (continente africano)


A los argentinos nos suenan estas islas, pero no por las bondades con las que las ha dotado la naturaleza. Lo cierto es que allí el clima de Seychelles parece perfecto. En el Océano Índico, la temperatura en las islas nunca baja de los 24¦C ni supera los 32¦C, mientras que la del agua varía unos pocos grados de la del ambiente. Con vientos alisios y algunos días de lluvia en diciembre y enero, siempre es verano en Seychelles.


Es uno de los últimos paraísos tropicales prácticamente vírgenes, de esos que parece que solo existen en las películas. Esta isla, ubicada al noroeste de Madagascar, en el Océano Indico, está formada por 155 más de origen granítico y coralino, rodeadas de playas de arenas blancas y bañadas por las cálidas y cristalinas aguas del océano Índico. Solo leer su descripción ya es todo un lujo.


Una de las atracciones principales de Victoria, la capital, es el Jardín Botánico, donde pueden observarse ejemplares de tortugas gigantes que son endémicas de estas islas, además del mar con excelentes condiciones para el buceo.
 
Cartagena de Indias (Colombia)


Si hay un lugar donde reina el clima tropical es en Cartagena de Indias, la ciudad portuaria en la costa caribeña de Colombia. No solo hay buena temperatura sino que los días de lluvia tienen un promedio de tan solo 6 jornadas en el año y que además generalmente sopla una suave brisa marina que amaina cualquier intento de calor insoportable y humedad, según los últimos registros, por lo que este destino es ideal para recorrer de una punta a la otra. Y tiene qué mostrar. No sólo playas (la Isla de Barú con playas de arena blanca y palmeras o las Islas de Rosario famosas por sus arrecifes de corales para citar algunos ejemplos). Hay que tener en cuenta que junto al mar, se encuentra la Ciudad Vieja amurallada, que se fundó en el siglo XVI, con plazas, calles de adoquines y edificios coloniales coloridos y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad.
 


Fuentes consultadas: Blog Logitravel, Blog El Viajero Fisgón, National Geographic.