El coordinador nacional del programa Carnes del INTA, Daniel Rearte, se refirió a la realidad ganadera actual en la Argentina, que asegura la competitividad.

"La ganadería está viviendo un momento muy bueno, casi excelente", expresó el técnico Daniel Rearte, coordinador nacional del programa Carnes del INTA Balcarce, Buenos Aires.

Para "no pecar de exceso de optimismo", aclaró, se refirió a que los precios actuales aseguran una competitividad con respecto a otras actividades, lo cual determina que el sector posea "una intención clara de crecer, en términos de stock y de producción".

El técnico del INTA señaló, además, que esos precios no serían coyunturales sino que "vienen para quedarse", dado que se trata de un "acondicionamiento al precio internacional".

Para el coordinador, la reducción del consumo de carne per cápita no debe interpretarse negativamente: "Durante años estábamos diciendo que la Argentina tenía que ordenar el consumo de sus carnes, que eran un exceso los 70 kilos que se consumían", dijo y agregó que en el segundo país del mundo, los Estados Unidos, el consumo era de 50 kilos.

"Hoy hay un descenso provocado, principalmente, por la disminución en la oferta. Esta disminución de la oferta genera un incremento en el precio que hace que hoy estemos en un consumo de los 53,55 kilos. Y es precisamente éste el consumo que, desde el punto de vista técnico, le conviene tener al país, porque hace que siga siendo el número uno en el mundo en términos de consumo de carne vacuna", explicó Rearte.

Al mismo tiempo, el técnico del INTA destacó que ese nivel de consumo ya instalado permitirá que se promuevan e incorporen en los consumidores las carnes alternativas y complementarias, como la carne porcina y la aviar.