Un arbusto es una planta leñosa que suele medir no más de tres metros de altura y que se ramifica desde su base.

Constituyen por sí un elemento esencial en el diseño de jardines. Casi podría decirse que son irremplazables. Se usan para cubrir cercos, darles estructura a los canteros, o simplemente, aportar movimiento y color en el jardín. Como muchos de ellos permiten ser cultivados en macetas, resultan ideales para patios, galerías y balcones.

Es muy importante conocer sus características y necesidades básicas de cultivo. No todos se adaptan a las mismas situaciones ni tienen iguales desarrollos y formas.

Hay arbustos que son de sombra, otros son de sol; para algunos el suelo debe ser húmedo; o simplemente, algunos pierden sus hojas en invierno mientras otros las conservan. También los hay de diferentes coloridos y follajes. La propuesta hoy son las especies perennes, que permiten ornamentar tu jardín todo el año.

Usos y cualidades

Los arbustos ornamentales son un tipo de plantas valiosísimas y fundamentales en el jardín. Tienen múltiples utilidades.

Antes de ir con ellas, me gustaría definir qué es un arbusto con 4 características. A veces no está muy claro.

Los arbustos, se caracterizan por lo siguiente:

1- Tienen tallos leñosos (no son herbáceos, tiernos, como las plantas de temporadas).

2- Están, generalmente, ramificados desde el suelo, es decir, que a diferencia de los árboles, que tienen, por lo común, un tronco único, los arbustos desarrollan varios tallos desde el suelo.

3- Tienen una altura que no suele sobrepasar los 3 m. La mayoría tienen entre 1 y 2 metros de alto. Aquí hay que decir que esto es lo normal, aunque hay arbustos que también pueden hacerse arbolitos. Por ej.: la Camelia (Camelia japónica) se cultiva como pequeño árbol, con un tronco solitario; Acebo (Ilex aquifolium) también puede llevarse a árbol, Adelfa (Nerium oleander), Pitosporo (Pittosporum tobira) entre otros.

4- Los arbustos, al igual que los árboles, pueden ser de hoja caduca o de hoja perenne. Los de hoja caduca pierden todas sus hojas cada año, en otoño, mientras que los de hoja perenne no, las conservan durante el invierno.

Cualidades estéticas

Flores: hay arbustos con flores del color que deseamos tener.

Hojas: hay arbustos que tienen hojas manchadas de amarillo o de blanco, hojas grises, hojas rojas y hojas amarillas. Al igual que encontramos toda la gama de los verdes.

Frutos: algunos poseen frutos decorativos (Madroño, Cotoneaster, Acebo, Granado, Piranta, Eskimia, Sinfocarpo, Aucuba, etc.).

Formas: hay arbustos con diferentes formas, que nos permite dibujar en el paisaje todas las formas posibles.

Texturas: también juegan un rol protagónico en cuanto a ornamentación, encontramos hojas con vellosidades, otras que presentan doble color, las carnosas, son algunos de los ejemplos.

Aroma: muchos tienen flores u hojas con aromas, esto también es importante dependiendo de el lugar a cubrir. Hoy se implementan los aromas como otro elemento importante en la vida saludable del hombre.

Utilidades

– Se plantan en grupos (masas arbustivas) o aislados (un arbusto solo, sin nada alrededor). Son esenciales en la mayoría de jardines.

– Sirven para hacer setos y borduras. Así permite separar zonas, aislar del exterior, del ruido y de la contaminación atmosférica y proteger del viento.

– Determinadas especies son aptas para podarlas como formas talladas artísticas (este tipo de poda se llama topiaria).

– Algunas especies (bajas y de crecimiento desparramado) son buenas como plantas para tapizar el suelo. Ideales para una rocalla o para plantar en un talud. Por ejemplo los junísperos.

– También algunas especies permiten ser cultivadas en macetas y jardineras, estas se adaptan para patios, galerías, entradas, quinchos, entre otros lugares.

– Hay arbustos con frutos comestibles: frambuesa, zarzamora, quinotos, etc.

ARBUSTOS ORNAMENTALES PERENNES

– El efecto maravilloso de estas plantas es inmediato ya que cumplen la función de definir y delimitar espacios, tanto en jardines grandes como chicos. Podemos decir que son de bajo mantenimiento y de larga vida.

– Follajes, flores, frutos y perfumes son algunas de las cualidades ornamentales que nos ofrecen.

– Existen en todas las magnitudes para ser utilizados en el diseño paisajístico, algunos simulan pequeños arbolitos, hay medianos, chicos y hasta enanos.

– A estas especies se las cuida con podas de limpieza, se cortan las ramas secas, quebradas o enfermas. Salvo las topiarias, que deben mantener la forma permanente.

– El control de enfermedades y plagas es fundamental ya que son persistentes.

– Hay arbustos de pleno sol, de sombra, de media sombra y para todos los climas.

– Para contemplar el encanto de nuestro jardín debemos considerar también la posibilidad de que su composición resulte atractiva para ocasionales visitas como los colibríes y mariposas.