Con la llegada del frío, la mayoría de las plantas entran en un estado de reposo vegetativo. Un parón natural e imprescindible
que les permite mantenerse vivas, ahorrando nutrientes y energía, ante un clima que no favorece el crecimiento. Pero esta pausa vegetal no significa que nos olvidemos de ellas por completo. No solo necesitarán que sigamos regándolas, aunque en una cantidad infinitamente menor a la de otras épocas del año. También demandarán ciertos cuidados fundamentales para poder despertar del letargo con la llegada del buen tiempo.

Aunque tengamos en claro que los cuidados del jardín en invierno son imprescindibles, el frío no invita demasiado a salir al jardín. Pero nada como sacudirse la pereza y aprovechar las horas centrales del día para llevarlas a cabo. Y no solo porque sea el momento más beneficioso para nosotros, también lo será para tus plantas ya que es precisamente ese momento del día el ideal para regar.

El invierno de julio 2025 llegó con todo. Cómo cuidar las plantas del frío.

Es, sin duda, la estación del año en la que menos atención le prestamos. Y, aunque nuestro pedacito de naturaleza está dormido, lo cierto es que sigue necesitando de nosotros. Es un buen motivo para conocer los cuidados del espacio verde imprescindibles para que con la llegada de la primavera, puedas lucir plenamente de él. Preparar el jardín para la primavera pasa por prestarle la atención que merece en los meses de frío.

En invierno las tareas no solo es plantar aquellas plantas de exterior, bulbos o árboles de plantación invernal. Además de eso, es fundamental realizar en él labores mínimas de mantenimiento que no solo persiguen cuidarlo. De este modo evitarás quebraderos de cabeza de cualquier amante de la jardinería: las enfermedades. Así que veamos en detalle las tareas que tendemos que realizar en pleno invierno:

Eliminar las plantas estropeadas, clave para evitar infecciones

Con la llegada del frío, son muchas las plantas que se secan o se pudren. Y, aunque pensemos que no pasa nada por dejarlas ahí, nada más lejos de la realidad. Lo cierto es que una planta en mal estado es un foco de infecciones y hongos, por lo que eliminarlas debe ser una tarea prioritaria. Evitar los hongos es uno de los cuidados del jardín en invierno. La cosa no consiste, únicamente, en eliminar la planta del lugar en el que esté. También es recomendable sanear el sustrato en el que estaba plantada y el que lo rodea. Una manera de eliminar de nuestra ecuación cualquier posible foco de infección.

Limpiar el jardín

Una idea muy aconsejable es limpiar el jardín de hojas y ramas de arboles que hayan caído durante el otoño. Las hojas, si no las recogemos, pueden afectar al césped con la proliferación de hongos. Por eso, es conveniente recogerlas y compostarlas para utilizarlas dentro de unos meses como compost. Asegurarse que el suelo drene bien y evacue todo el agua de lluvia o riego que caiga durante estos meses. Comprueba el drenaje y limpia de hojas y restos las alcantarillas y desagües del jardín.

Las malas hierbas

Aunque nuestras plantas de exterior y árboles estén en un reposo vegetativo forzado, hay algunas que siguen prosperando a pesar de todo. Nos referimos a las hierbas adventicias, esas que crecen entre las nuestras en cualquier época del año y que, lejos de ser únicamente poco estéticas, también pueden ser nocivas para nuestra naturaleza. Eliminar las malas hierbas del jardín es crucial. Su presencia no solo roba nutrientes a nuestras plantas, también sirve de amparo para la presencia de plagas y hongos. Por eso y aunque haga frío, tendremos que dedicar tiempo a arrancarlas y eliminarlas a conciencia.

Proteger las plantas y sus raíces, fundamental para ahorrarnos disgustos

Es necesario proteger aquellas especies susceptibles a las heladas y los ejemplares recién plantados. Se aconseja seguir los registros meteorológicos y taparlas con la malla antihelada. Cuando sale el sol se levanta esta tela liviana para permitir la entrada de los rayos solares y del aire.

Mulching, uno de los cuidados del jardín en invierno  imprescindibles

Hasta bien entrada la primavera, es importante revisar si nuestras plantas y sus raíces están bien protegidas. Evitar, gracias a él, que las heladas tardías del invierno pasen factura a nuestras plantas.

Cuidado de los árboles frutales

Es importante proteger los cítricos de las heladas, sobretodo los ejemplares nuevos,para ello, cubriremos completamente el árbol con maya de ocultación. También las raíces han de ser protegidas cubriendo la superficie alrededor del cítrico con corteza de pino. También es conveniente encalar los frutales para evitar que los insectos invernen en los troncos de los arboles. De esta manera, tendremos nuestros arboles saneados, perfectos para la llegada de la estación primaveral.

El sustrato es clave

El frío, las heladas y la nieve tienden a compactar el terreno. Algo que no solo impide en gran medida el correcto crecimiento de las plantas sino que, además, suele provocar el empobrecimiento de los nutrientes del suelo. Por esa razón, es importante aplicar un abono orgánico al suelo, como el compost o el humus de lombriz, antes de la llegada de la primavera. Gracias a él, no solo enriqueceremos el sustrato, también mejoraremos la aireación; y despertaremos a toda la fauna microbiana que vive en el terreno y que es clave para la generación de nutrientes. Para que nuestro abonado de fondo consiga su objetivo, lo ideal es remover la tierra y mezclarla con el fertilizante. Es importante llevar a cabo esta labor lejos de las raíces para evitar dañarlas. Además, es fundamental saber cómo usar humus de lombriz correctamente. Algo de suma importancia ya que, si nos excedemos con la cantidad recomendada, corremos el riesgo de quemar nuestras plantas.

Revisar la instalación de riego

Una tarea de la que no solemos acordarnos hasta que las temperaturas suben, un momento que exige tener nuestro sistema de riego a pleno rendimiento. Por eso, ver si nuestra instalación de riego ha sufrido algún desperfecto como consecuencia de las bajas temperaturas y la inactividad debe formar parte de la lista de cuidados del jardín en invierno. El momento ideal es cuando las temperaturas diurnas comiencen a subir, será entonces cuando podremos probar si los aspersores o el riego por goteo que tengamos instalado funcionan con normalidad. Probarlo nos permitirá detectar si alguna de las mangueras o de los aspersores se ha estropeado, y poder reponerlo con tiempo. Si solo tenemos manguera en nuestro jardín, tendremos que revisarla.

Y, si tenemos en mente instalar algún sistema de riego, el final del invierno es el momento ideal. Tendremos tiempo de tenerlo terminado antes de que empiece a hacer calor en condiciones.

Sanear el césped, sinónimo de evitar plagas

Es uno de los grandes olvidados de los meses de frío, aunque
persistan las bajas temperaturas y las heladas, no es momento de cortar. Es importante retirar las hojas muertas o cualquier otra materia orgánica que haya caído sobre el césped. Su presencia sobre nuestra hierba puede provocar la aparición de hongos.

Plantación de invierno

Para que nuestro jardín no pierda vida durante el invierno,
podemos optar a realizar plantaciones de temporada con ciclamenes, violas, malvones, entre otras flores. Del mismo modo, podemos aprovechar para disfrutar de las plantas típicas del invierno: arbustos como el acebo o la nandina es ahora cuando están llenos de bayas que dan color al exterior. Es un buen momento para plantar especies de hoja caduca y coníferas.

Puesta a punto de nuestras herramientas de jardín

El mantenimiento que necesitan es fundamental para cuando vamos a realizar cortes, por ejemplo toda la variedad de tijeras de poda, más los serruchos. La maquina de cortar el césped también se recomienda revisarla y ponerla a punto para cuando se deba utilizarla más seguido. cuando vamos a utilizarlas. Anticiparse puede ser interesante ya que pueden necesitar tanto ser afiladas como limpiadas en profundidad de cualquier presencia de óxido.

Planificación y diseño

Utilizar el invierno para planificar la disposición de plantas y flores para la próxima primavera, es una buena tarea. Esta lleva consigo la observación de las horas de sol de  determinados lugares del jardín, reestructurar lugares de estancia, como deck o parrilleros, hacer canteros nuevos, realizar senderos, etc.

Podas de árboles, arbustos, rosas y otras especies (Se tratarán
en otra nota específica de poda)