I magen simbólica. El ministro Triaca y el jefe de los empleados de comercio se mostraron felices por el acuerdo al que llegaron ayer al mediodía.

La Federación Argentina de Empleados de Comercio y Afines (Faecys) acordó ayer con las cámaras empresarias un incremento salarial del 15% en dos pagos: 10% a partir del 1 de abril y 5% en agosto, con cláusula de revisión en enero de 2019. El acta acuerdo, que beneficia a más de un millón de trabajadores de comercio, fue suscripto poco antes del mediodía en la sede central del ministerio de Trabajo, avenida Leandro N. Alem 650. De la firma participaron el titular de la cartera laboral, Jorge Triaca -recién llegado de su gira por Europa-; el secretario de Trabajo, Horacio Pitrau; el secretario general de Faecys, Armando Cavalieri; y los representantes empresarios Jorge Di Fiori y Fabián Tarrio. El acuerdo, además del beneficio para los trabajadores, dispara dos datos políticos relevantes, según estimaron en el sector de los empleados de comercio: es la paritaria ideal para el gobierno, porque ayuda a marcar tendencia en el país, y marca, una vez más el acercamiento de Cavalieri al Gobierno nacional.

El 15% sin cláusula gatillo es rechazado por gremios como docentes y bancarios.


De acuerdo con el convenio firmado, los trabajadores de comercio se beneficiarán un aumento salarial de un 15 por ciento, que serán pagos en dos cuotas: la primera cuota del 10% sobre los salarios vigentes regirá a partir del 1 de abril y la segunda del 5% desde el 1 de agosto. Según determina el acuerdo hay también una cláusula de revisión, por la cual las partes se comprometen a discutir nuevamente el tema salarial en enero de 2019, si se produce un desfasaje entre el 15% firmado y el acumulado de la inflación en diciembre. Durante los meses de enero, febrero y marzo de este año, los trabajadores de Comercio ya recibieron tres pagos de un 2% del salario, lo que suma un 6% en concepto de revisión de la inflación de 2017.

Otros gremios de menor porte también se anotaron en esta lista de acuerdos por el 15 por ciento en sintonía con lo que quiere el ministerio de Trabajo: son la Unión Obreros y Empleados Tintoreros, Sombrereros y Lavaderos, que lidera Luis Pandolfi, y el Sindicato Único de Trabajadores de Remises y Autos al Instante (Surya), del macrista Alejandro Claudio Poli.

De esta manera el Gobierno se apura a firmar acuerdos para marcar tendencia y mostrar el horizonte de acuerdos a todo el espectro sindical. Especialmente a los díscolos, como el bancario Sergio Palazzo. El miércoles pasado, las cámaras ofertaron una mejora ya que, luego de dos meses de sostener una oferta por el 9% más cláusula de revisión, ahora ofertaron 15 por ciento a pagar en 4 tramos: fue rechazada. Palazzo reclama 19,9% más gatillo retroactivo; o bien 24,8 por ciento que fue la inflación 2017. Con todo, este miércoles se vuelven a juntar.

Según publicaron distintos medios con llegada a la Casa Rosada, Presidencia ordenó eliminar las cláusulas gatillos ya que considera que se trata de instrumento que aunque le sirvió para cerrar los acuerdos en 2017, terminó resultando una suerte de indexación salarial que refuerza la inercia inflacionaria. En definitiva, lo que se intenta es que el ancla inflacionaria ya no esté dada por el atraso cambiario sino por los salarios.

La "cláusula de revisión" aceptada por Comercio y otros gremios está sujeta a la buena voluntad de los empresarios, que no están obligados a dar otro aumentos aunque los trabajadores tengan una pérdida del poder adquisitivo. O incluso podrían dar una compensación, pero menor a la pérdida.