“Los episodios recientes en la disputa por los recursos nacionales y su coparticipación con nuestras provincias hicieron evidente cual es el bloque de intereses tradicionales que pretenden consolidar las enormes asimetrías que aún existen en la Argentina. Mientras que muchas provincias necesitan realizar obras que permiten asegurar servicios tan esenciales como el agua potable para sus habitantes, la Corte Suprema de Justicia aseguró cautelar a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires recursos coparticipables que no le corresponden contrariando la ley de coparticipación vigente. Le quita dinero a los que más necesitan y destina esos mismos recursos a la ciudad más opulenta del país”, planteó Fernández. Hubo aplausos.

Habló de las asimetrías y se declaró porteño. “Soy orgullosamente porteño. Amo esta ciudad en la que nacieron Jorge Luis Borges, Roberto Arlt, Marta Minujin, Niñí Marshall, Aníbal Troilo, Marta Argerich y Luis Alberto Spinetta. Seres extraordinarios que marcaron nuestra cultura. Pero no puedo ser indiferente al ver las asimetrías que separan a esta maravillosa ciudad de rincones de la Patria en donde se postergan los sueños de argentinos y argentinas que parecen condenados al olvido. Nosotros no queremos perpetuar tanta injusticia”, dijo. Fue uno de los picos del discurso, generando la reacción de la oposición. “Es un honor que me insulte diputado Iglesias [Fernando]”, le dedicó el Presidente al diputado macrista.

“La intromisión de la Justicia en la ejecución presupuestaria es definitivamente inadmisible. Excede sus facultades, olvida la regla jurisprudencialmente fijada que reconoce “cuestiones políticas no judiciables” y pone en riesgo la lógica redistributiva de la Ley de Coparticipación Federal causando un severo daño al equilibrio de las cuentas públicas”, dijo el Presidente. Generó el aplauso de pie de la bancada oficialista.