La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió ayer un "gran acuerdo de todas las fuerzas políticas" para la recuperación salarial de los argentinos y para terminar con la inflación. En momentos en que Martín Guzmán renunciaba ayer a la titularidad del Ministerio de Economía, Cristina dijo que "es hora" de "convocar al resto de la sociedad" para hacer "algo diferente, porque hacer lo mismo, no va más".

"El mejor homenaje que podemos hacer a (el expresidente Juan) Perón es ver lo que hizo y tratar de acercar el bochín", expresó la vice al encabezar en la ciudad bonaerense de Ensenada un homenaje al exmandatario por el 48´ aniversario de su fallecimiento.

En esa línea, Cristina sostuvo que "es hora. Nosotros los peronistas (debemos) convocar al resto de la sociedad a hacer algo diferente, porque hacer lo mismo, no va más". Manifestó que el peronismo "es un movimiento nacional y popular con alegría y ganas de celebrar la vida" y pidió un "gran acuerdo de todas las fuerzas políticas" para la recuperación salarial de los argentinos.

La vicepresidenta recordó que Perón "llegó en 1943" y contó que "construyó el poder" al pedir "ir al Departamento Nacional del Trabajo". "Consigue transformarlo en Secretaría de Trabajo y Previsión. Cazó la lapicera y entró a firmar. ¿Y qué firmó? Derechos que los trabajadores no tenían. Firmó, por ejemplo, el aguinaldo, las vacaciones", repasó la vicepresidenta.

"Perón entró a firmar, por ejemplo, el Estatuto del Peón Rural. Se ganó el odio eterno de terratenientes en la Argentina. Fue tan atacado porque usaba la lapicera en función del pueblo, por eso lo atacaron. Por eso lo metieron preso, por eso después vinieron los bombardeos en la Plaza, el primer acto terrorista que tuvo la Argentina", recordó.

Por otra parte, se refirió a la reciente reunión que mantuvo con integrantes de la Fundación Mediterránea, entre ellos con el economista Carlos Melconian, y afirmó que "está claro que" el economista "no piensa como yo, ni yo como él, pero me gusta escuchar a todos".

"Sí tuvimos una coincidencia, que es en el problema de la economía bimonetaria, pero diferimos en cuanto al déficit fiscal. Tenemos que empezar a discutir en serio estos temas. No hay posibilidad si no hay un gran acuerdo", indicó.

En ese sentido agregó: "Me voy a reunir con quien me tenga que reunir cuantas veces sea para explicar nuestros fundamentos y tratar de persuadir al otro también".

La vicepresidenta se defendió de las críticas por sus dichos sobre los movimientos sociales y apuntó que "algunos integrantes" del Frente de Todos le quieren hacer decir cosas que, según ella, no dijo.

"Yo hablé de tres fenómenos: que no debíamos tercerizar la política social; que debíamos acabar con las altas y bajas, que las decidiera cualquier dirigente barrial y no el Estado; y la tercera que hubiera un control. Se armó una competencia entre algunos para ver quién agraviaba y mentía más, que les queríamos sacar los planes a los pobres", lanzó.

También insistió la exmandataria en que es necesario "empezar a rediseñar el sistema y pensar en un ingreso universal que no dependa del favor de nadie". Atentos escuchaban el diputado y presidente del peronismo bonaerense, Máximo Kirchner; el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof; y el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, entre otros.

Multitud. Gran cantidad de seguidores fueron a escuchar las palabras de CFK en la provincia de Buenos Aires.


 

  • Operativo clamor por la presidencia

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner llegó al homenaje a la figura de Juan Domingo Perón, en Ensenada, distrito gobernado por el kirchnerista Mario Secco, en medio de un operativo clamor. Allí, la militancia le pidió que vuelva a ser candidata en 2023 pero lo desestimó con un sugestivo gesto.

Y así se lo hizo oír en el acto que se produjo ayer por la tarde en el Polideportivo Municipal en esa localidad. "Presidenta, Cristina presidenta, Cristina presidenta", fue el cántico que escuchó la vicepresidenta cuando Secco, en un discurso encendido, pedía que "respetaran a esta mujer". Luego, la militancia continuó con el canto y Cristina, antes de beber un vaso con agua mientras los escuchaba, movió su cabeza en forma negativa, para calmar a la muchedumbre que se envalentonaba con el mensaje.


Dura crítica de D"Elía

Horas antes de que Cristina encabezara el acto en homenaje a Juan Perón, el dirigente social Luis D"Elía volvió a cruzarla en una entrevista radial donde la acusó de estar "abrazada a la derecha" y de querer destituir al presidente Alberto Fernández a cambio de impunidad judicial.