Los restos del ex gobernador José Manuel De la Sota ya descansan en el cementerio San Jerónimo donde cientos de vecinos lo despidieron para arrojarle flores al cortejo fúnebre y dar su último adiós. Sólo familiares y allegados ingresaron hasta el panteón.

Durante la mañana arribaron al Centro Cívico el ministro del Interior de la Nación, Rogelio Frigerio, el presidente Honorable Cámara de Diputados de la Nación, Emilio Monzó, y Juan Carlos Maqueda, ministro de la Corte Suprema de Justicia. 

A puertas cerradas tuvo lugar cerca del mediodía una ceremonia privada enabezada por monseñor Ñañez y el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti. También emitieron unas palabras, el intendente Ramón Mestre, como presidente de la UCR y Emilio Monzó.

El Gobierno cordobés, a través del decreto N° 1500, dispuso un duelo simbólico durante cinco días.