Reclamo. "Justicia por Ema Garay" el reclamo generalizado se observa con más frecuencia entre los riojanos desde el sábado pasado, día en que falleció el aspirante.

La Justicia ordenó la detención de seis cadetes de años superiores por la muerte del joven Emanuel Garay, que aspiraba a ingresar a la Policía de La Rioja, informaron ayer medios digitales.


El sábado pasado, Emanuel Garay falleció tras permanecer varios días en estado crítico, por el entrenamiento extremo al que fue sometido en la Escuela de Policía riojana. Además de los comisarios y oficiales detenidos, ahora la Justicia ordenó la detención de seis cadetes de años superiores que habrían participado de los tormentos, informó ayer el diario Clarín.


Quienes están tras las rejas por esta muerte son cuatro comisarios y cuatro oficiales que trabajaban como instructores. La familia de la víctima también apuntaba a los cadetes superiores y el fiscal de La Rioja que lleva el caso los escuchó.


José Nicolás Azcurra, abogado de la familia de Emanuel, el cadete que murió en un hospital de La Rioja a raíz de los excesos que recibió durante un entrenamiento en la Academia de Policía, dijo que ampliaron la denuncia contra 6 personas más y que también se cometió el "delito de tortura".


"Hay 8 detenidos y denuncié a seis más. Se pidió la detención por el riesgo a presiones y a cualquier otro comportamiento que pueda interrumpir la acción judicial", explicó en Cadena 3.

>


Azcurra precisó que "los cadetes aspiraban a ingresar a la policía, con el espíritu de colaborar y servir". "Garay se entrenó mucho para esto y fue sometido a una gravísima sesión de tortura donde se deshidrata y cae a pesar de que él pedía agua y le decían: andá a pedirle a tu mamita", explicó.


"Cuando convulsionó se asustaron, había dos centros de salud, un hospital de alta gama y un centro policial y no los usaron. Llamaron a una ambulancia que demoró y cuando ingresó al hospital estaba en mal estado, esto le produjo una deshidratación aguda y esto una falla renal que produjo una falla multisistémica", precisó. Si bien cuestionó a la Justicia porque "está colapsada", destacó que el gobernador Sergio Casas "ha colaborado y ha contenido a la familia".


"Se está hablando de estudiar el tema y tener una legislación que establezca los reglamentos con los que deban estudiar los policías. Cómo no los van a hidratar, los mandaron a una cancha de básquet que le dicen la sartén y muchos jefes de policías cuentan que sus hijos se quemaron ahí", agregó.
"La sartén le llamaban a la cancha de básquet donde hacían ejercicios. Es un lugar con el piso deteriorado. Le dicen así por la temperatura que se levanta en ese lugar", explicó Azcurra.


En declaraciones al diario La Nación, el letrado contó que "las mujeres salían con ampollas en los pechos porque las hacían arrastrarse en ese lugar".


Lucía, hermana de Luis Oropel, de 25 años (otro de los afectados), señaló ayer que "sigue con diálisis" y que su familia espera que "comience a recuperar la función renal".


Según su testimonio, el cadete fue sometido a "nueve horas de entrenamiento físico muy duro y bajo altas temperaturas que hubo ese día, pero más allá de eso (los instructores) han tenido la crueldad de no darle a los chicos ningún tipo de hidratación".


La joven precisó que su hermano sufrió una "deshidratación severa, y como todos los chicos tenían todos los músculos rotos debido al excesivo trabajo físico que tuvieron y eso ha liberado toxinas que se les pegaron en los riñones, los ha paralizado y dejaron de funcionar".


"Nos ramearon, nos tiraron al suelo, no nos dieron agua durante 6 horas. Tuvimos que tomar agua podrida de un pozo donde había sapos para sobrevivir", dijo al sitio TN Jorge, uno de los aspirantes torturados.