Jurado debate veredicto contra el narco mexicano por segundo día.
 

El jurado del proceso contra Joaquín 'El Chapo' Guzmán pidió este martes escuchar nuevamente una conversación telefónica donde el acusado habla del tráfico de metanfetaminas, y también parte del testimonio de un ex socio del mítico capo mexicano vinculado a su principal traficante de "hielo".

En su segundo día de deliberaciones tras un juicio de tres meses, el jurado pidió también las transcripciones completas de los testimonios de los hermanos colombianos Alex y Jorge Cifuentes, grandes proveedores de cocaína de El Chapo, que le ayudaron a vender esa droga, heroína y metanfetaminas en Canadá y Estados Unidos.

Solo el testimonio de Alex Cifuentes llevó cuatro días de audiencias, y el de su hermano otro tanto, lo cual hace pensar que el veredicto puede demorar más de lo previsto. El juez Brian Cogan dijo que el jurado desea volver a escuchar una conversación telefónica del acusado "vinculada al 'hielo'" (un tipo de metanfetaminas).

Los 12 miembros del jurado también pidieron la transcripción de parte del testimonio de Jesús "Rey" Zambada, que manejaba las operaciones del Cártel de Sinaloa en Ciudad de México y es hermano del cofundador del cartel Ismael 'Mayo' Zambada. Especialmente se interesaron en lo que éste dijo con relación a "Chéspiro".

El Rey, encarcelado en Estados Unidos como los hermanos Cifuentes, dijo al jurado que Chéspiro trabajaba traficando metanfetaminas para el Chapo, y que lo conoció en un parque de Ciudad de México a pedido de su hermano Mayo. El Rey dijo que con Chéspiro organizó al menos una importación de unas 20 toneladas de efedrina proveniente de Asia, por medio de empresas legales, para poder producir "hielo".

El jurado ya había preguntado el lunes, en su primer día de deliberaciones, si la efedrina es considerada una metanfetamina (es un componente). El juez les respondió que se remitieran a las pruebas presentadas por la acusación.

El Chapo, de traje azul oscuro y camisa celeste, escuchó en silencio al juez Cogan. Su joven esposa Emma Coronel, vestida con un traje de chaqueta y pantalón negros, está presente en el tribunal como casi cada día desde que empezó el juicio.

El jurado debe decidir si Joaquín El Chapo Guzmán, de 61 años, es culpable o no de 10 cargos de tráfico de cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana a Estados Unidos a lo largo de 25 años, así como de lavado de dinero y posesión de armas de fuego. También es acusado de 27 violaciones del código, incluida conspiración para asesinar.

Si es hallado culpable, podría pasar el resto de su vida tras las rejas

Tras interrogar a los jurados este lunes, el juez Cogan decidió que el juicio puede continuar como estaba previsto. "Yo no tengo opinión sobre el veredicto al que deben llegar", dijo Cogan en sus instrucciones al jurado. "No tengo perro en esta pelea".

"Acuérdense de que prestaron juramento (...) para alcanzar un veredicto basado solamente en las pruebas recibidas" durante el proceso, afirmó. "Todos ustedes podrían estar vistiendo togas negras" para realizar este trabajo, acotó.

En sus alegatos finales, el abogado de El Chapo Jeffrey Lichtman pidió el jueves pasado al jurado no condenar al acusado en base a "mentiras" de testigos cooperantes que son "basura". También aseguró que todo el proceso es una "farsa", ya que el verdadero jefe del cartel de Sinaloa es su co-fundador Ismael "Mayo" Zambada, que nunca pasó un día en la cárcel.

El gobierno, en tanto, rogó al jurado que no permita que el acusado vuelva a escapar. "No lo dejen escapar de su responsabilidad. Háganlo responsable de sus crímenes. ¡Hállenlo culpable de todos los cargos!", pidió el miércoles la fiscal Andrea Goldbarg en sus alegatos finales.

Durante el juicio, el gobierno presentó a 56 testigos y abrumadoras pruebas de la culpabilidad del acusado, incluidas llamadas telefónicas entre El Chapo y sus socios, que fueron interceptadas, y conversaciones con el capo grabadas por soplones a escondidas.

La estrategia de la defensa, en tanto, se centró en atacar una y otra vez la credibilidad de los testigos cooperantes: ex secretarios, pilotos, proveedores de cocaína, su principal traficante en Estados Unidos, un gerente, un contador, un ex jefe de comunicaciones y hasta una ex amante de El Chapo, en su gran mayoría presos y que buscan que su colaboración les ayude a reducir sus respectivas sentencias.

Estas son las claves de lo fue un juicio que en muchos aspectos se asemeja a lo narrado en las series de Netflix:

Cargos. La Fiscalía imputa al capo mexicano diez cargos, aunque el principal es el de participación continuada en una empresa criminal, que contiene a su vez los otros nueve, y que lo acusa de haber exportado desde 2003 a Estados Unidos toneladas de cocaína, heroína, marihuana y metanfetaminas.

De acuerdo con los datos que manejan las autoridades, como resultado de dicha empresa, 'El Chapo' habría obtenido una fortuna de más de 14.000 millones de dólares.

Con las evidencias presentadas en el juicio por 56 testigos traídos por la Fiscalía, con 14 cooperantes relacionados con 'El Chapo' Guzmán, el Gobierno de Estados Unidos pretende confirmar también delitos relacionados con la posesión y uso de armas de fuego, así como la conspiración para el blanqueo de dinero. De todos estos delitos el acusado se declara "no culpable".

Penas y jurado. El primer cargo de los que se imputa al mexicano conlleva la cadena perpetua, de ser declarado culpable de manera unánime por los doce miembros del jurado.

La identidad de los miembros del jurado popular, siete hombres y cinco mujeres, que comenzarán a deliberar el lunes, ha sido mantenida en secreto por razones de seguridad, debido al miedo a que los socios de 'El Chapo' puedan vengarse por la decisión que tomen.

La decisión fue adoptada por el juez Brian Cogan, encargado del caso, que ordenó a la policía que escoltaran a los miembros del tribunal desde y hasta sus domicilios.

Los miembros del jurado atendieron los testimonios de los testigos durante los tres meses del proceso aunque, en alguna ocasión, los extensos interrogatorios así como su excesivo detalle motivaron que alguno de ellos estuviera a punto de quedarse dormido.

Prisión. De acuerdo con fuentes del caso, el juez Cogan podría contemplar la posibilidad de enviar a 'El Chapo', en caso de ser condenado, a la prisión federal del Estado de Colorado, la más segura del país, situada en medio del desierto. Durante su juicio estuvo en un penal de máxima seguridad de Manhattan.

Testigos. De los 56 testigos que desfilaron ante el jurado, 14 eran antiguos colaboradores o socios de 'El Chapo', encarcelados en Estados Unidos, bien porque fueron detenidos en el país, bien porque fueron extraditados a territorio estadounidense.

Entre quienes testificaron, pasaron algunas de las personas más cercanas al capo, "manos derechas" como Vicentillo Zambada -hijo de Ismael 'El Mayo' Zambada, co líder del Cártel del Sinaloa-, o un antiguo colaborador llamado Dámaso López.

También colaboraron con la Fiscalía antiguos "secretarios" de 'El Chapo', como los hermanos Jorge y Alex Cifuentes. Este último aseguró que pagó un soborno de 100 millones de dólares al ex mandatario de México, Enrique Peña Nieto, lo que habría ocurrido dos meses antes de que jurara como presidente, en 2012.

Brian Cogan, el juez que dirige el proceso contra El Chapo Guzmán.
 

No faltaron los relatos de las huidas de 'El Chapo' de las prisiones de Puente Grande y el Altiplano, ambas en México, así como el transporte de cocaína en latas de jalapeños. 'El Chapo' llegó a pensar en traficar con un submarino.

Vicentillo contó cómo 'El Chapo' le narró su huida a bordo de un carro de lavandería del primer presidio, cuando un trabajador de la prisión llamado "Chito" le escondió bajo mantas y sábanas, y Guzmán contaba las puertas escuchando los ruidos que hacían.

Por otro lado, López explicó la huida a través de un túnel de la cárcel del Altiplano en el 2015, cuando el capo ordenó la construcción de dicho pasadizo para que pudiera huir del correccional.

También se desveló el encargo de asesinatos de competidores y socios desleales, incluso torturas, lo que en cualquier caso no forma parte de los cargos al ser juzgado en tierra estadounidense.

Fiscalía. En su alegato final, la Fiscalía insistió en la "montaña de evidencias" que probaban la culpabilidad de 'El Chapo'. No sólo los testimonios de los cooperantes, sino también los especialistas de las diferentes agencias de seguridad que participaron en las capturas del capo o en las investigaciones.

Emma Coronel, la esposa de El Chapo Guzmán, asistió a casi todas las audiencias del juicio.
 

Explicó al jurado que lo importante del proceso contra 'El Chapo'no es demostrar si éste era el máximo líder del cártel de Sinaloa, sino catalogarlo como un jefe, "organizador, supervisor u otra posición de esa organización" para condenarlo por narcotráfico.

Defensa. La defensa resumió su postura final atacando la veracidad de los testigos cooperantes, todos ellos "mentirosos y criminales", por lo que apela a la duda razonable para no condenar.

Los defensores pidieron al jurado que se "aferren a sus dudas" y declaren a Guzmán no culpable ya que, de acuerdo con su criterio, no ha quedado demostrado que 'El Chapo' fuera el líder del cártel. Durante todo el juicio la defensa defendió que el liderazgo del cártel fue de 'El Mayo' Zambada y que 'El Chapo' no es otra cosa que un chivo expiatorio mientras Zambada sigue libre.

Familia. La joven esposa del capo, Emma Coronel, apenas faltó cuatro días a las múltiples sesiones del juicio contra su marido, 32 años mayor que ella, acudiendo acompañada en alguna ocasión de sus gemelas.

Coronel tuvo que afrontar la lectura de conversaciones y cartas de amor que Guzmán mandaba a sus amantes, incluso a la testifical de una de ellas, Lucero Sánchez, la "Chapodiputada", que aseguró que la relación que mantuvo con 'El Chapo' entre 2011 y 2013 fue "de pareja".

El viernes publicó una emotiva carta en sus redes sociales pocas horas después de haber concluido el juicio contra su marido en la que reitera su amor por él: "siempre contará conmigo".