Cuando uno habla de voleibol en San Juan, lo primero que se viene a la memoria es Obras Sanitarias. Es cierto que UPCN ha posicionado a la provincia en el primer lugar del país y la puso en el mundo de la disciplina en el siglo XXI, pero no se puede obviar que desde los años ’70 hasta el final de pasado siglo XX todo lo relacionado a este deporte, en la rama masculina, está emparentado con la entidad de la calle 25 de Mayo, cuya cantera inagotable proveyó y provee de jugadores sanjuaninos a los seleccionados nacionales.

De esa ‘fábrica’ de jugadores que es Obras Sanitarias, ha visto la luz en el presente año un grupo de pibes de entre 10 y 12 años que dominó la categoría sub-13. Dirigidos por Mauro Lima y Agustín Romero, los chiquilines que desde el año pasado comparten tardes de entrenamientos se consagraron campeones del torneo oficial de la Federación Sanjuanina y luego coparon el primer puesto del podio en todos los certámenes en que participaron: el Torneo Universidad, el Campeonato Regional en San Luis, el torneo internacional UVT, la Copa Penecas Internacional de Manquehue (Chile) y, el pasado fin de semana la Copa Argentina FEVA, jugada en Chapadmalal.

Del certamen participaron 25 conjuntos divididos en cinco zonas, dos de cinco equipos. Los chiquilines sanjuaninos superaron la primera ronda ganando los cuatro partidos que les tocó jugar (ver detalle) en los que cedieron un solo set (12-1).

 

El dibujo del torneo ubicó a diez equipos en la lucha por los cuartos de final (dos zonas de cinco equipos), la que se denominó zona Oro. Allí también, superaron a sus cuatro oponentes, cediendo en esta ocasión dos sets (parcial 12-2).

Quiso el destino que en la semifinal del certamen debieran medirse con los chaqueños de General Pinedo de Chaco un aguerrido oponente al que habían derrotado claramente en la fase inicial. Repitieron el resultado 3-0, en un trámite un poco más apretado que en el primer enfrentamiento.

Lo mismo les ocurrió en la final, la que debieron disputar con el elenco de Mar Chiquita, al que habían vencido en el último partido de los cuartos de final, en encuentro que empezaron ganando 25-9 y después se quedaron con los otros dos set por diferencia mínima (25-23 y 33-31).

 

 

Conociendo al rival, sus puntos fuertes y sus debilidades, los pibes de Obras salieron decididos a no darles ninguna opción de ilusionarse con romperles el invicto. Así fue que ganaron los tres ‘chicos’ con clara diferencia: 5, 6 y 9 puntos. Mostrando que tienen el ADN de todos aquellos que hicieron grande a Obras Sanitarias y por ende al San Juan voleibolista.