El conocido cinéfilo Santiago Carlos Cerimedo (71) sospechó que algo no andaba bien cuando entró a su casa y vio a sus perros adentro, algo que no debía ocurrir pues siempre los deja en el fondo. Sobre las 20 de anoche no tardó en descifrar el enigma: delincuentes habían entrado por el fondo de esa casa en la Villa Rodríguez Pinto, Rivadavia, y luego de romper el cristal de la puerta, se abrieron paso con las llaves que habían quedado puestas. Lo que llamó la atención fue que, al parecer, la alarma no se activó pues los responsables del servicio que paga no le llamaron para avisarle, dijo ayer.

Lo demás pasó a ser parte de una situación olvidable. Luego de entrar, los delincuentes revolvieron todo en sus dos dormitorios y al final huyeron con unos $11.000, joyas, una notebook con fotos y recuerdos de sus afectos, un aparato de DVD, una cámara de fotos semiprofesional que usaba para hacer algunos videos y lo más costoso e importante, el proyector con el que se encargaba de difundir cultura en ciclos gratuitos de cine.

‘Mi señora se había ido a clases de cerámica acá, como a dos cuadras. Y yo volvía del centro de jubilados en el que soy presidente de una reunión con el intendente. Me llamó la atención que los perros estuvieran adentro pero ahí nomás me di cuenta que nos habían entrado a robar. Lo que me llama la atención es que la alarma no se activó, porque de la empresa no me llamaron para avisarme’, dijo ayer Cerimedo.

Entre los aparatos robados estaba el proyector que usaba para difundir películas gratis.

‘Me habrán llevado por lo menos $50.000 en los aparatos, unos $11.000, joyas y no sé qué más porque aún no reviso a ver qué me falta. Vivimos acá hace cuatro años, es un lugar tranquilo y es la primera vez que nos entran a robar. Le pido a la gente que le ofrezcan nuestras cosas que no las compren y avisen a la Policía’, pidió.

Anoche, personal de la Policía Científica levantaba rastros de la escena del hecho para sumarlos a la investigación con la idea de determinar quiénes son los delincuentes.