Fue la necesidad lo que llevó a Marisa a salir de su casa con sus niños en el barrio 12 de Diciembre hasta el barrio Hualilán, Rawson. Su misión era venderle una multiprocesadora a un vecino y amigo de la familia para tener qué comer, porque lo que gana su marido en las cosechas no le alcanza.

Sobre las 23,30 del martes ya habían cerrado la operación con Mauricio Arias y se despedían cuando ocurrió un desastre: su hija Kiara Rodriguez (5) salió hasta afuera, donde jugaba su hermanito mayor y en eso llegó a la calle Rizo, justo cuando pasaba un motociclista que no pudo frenar, la embistió, la arrastró unos 8 metros y se dio a la fuga. Entonces hubo desesperación, porque la nena no aparecía y cuando la hallaron entre una bolsas de basura, estaba toda ensangrentada. Una fractura en el rostro, otra en su brazo derecho y una más en la pierna izquierda, además de un fuerte golpe en el abdomen, mantenían en vilo a la familia. "Que lo encuentren y pague por lo que hizo", pidió ayer la mujer, dolida.