Parte del conflicto en Ullum parece haber quedado solucionado luego de que ayer el Concejo Deliberante en pleno sesionara de manera extraordinaria y votara por unanimidad reintegrar en sus funciones al intendente Leopoldo Soler. Es que desde el viernes y hasta la ordenanza de este miércoles, que quedará oficializada hoy, en el municipio había una disputa entre el intendente electo y su interino, Alfredo Carrizo, ya que los dos sostenían que estaban a cargo de la comuna. El conflicto se produjo porque los ediles afirmaban que el traspaso entre Carrizo y Soler debía pasar por el Concejo Deliberante a través de una ordenanza y no con un decreto, como ocurrió con el documento que fue firmado el viernes pasado por el propio basualdista (ver foto y recuadro).


El intendente estuvo fuera del municipio durante los 22 días que duró su internación por problemas de salud. En ese periodo el presidente del Concejo, Alfredo Carrizo, asumió en el Ejecutivo e inmediatamente dispuso una serie de cambios en la comuna donde se destaca haber desplazado a 18 contratados, echar a tres funcionarios e incorporar a otras 12 personas. Ante esa situación y ya en la comuna, el viernes Soler firmó cinco decretos: uno dándole de baja a la ordenanza que designaba a Carrizo como autoridad municipal y cuatro documentos para echar a los titulares de Deporte, Salud, Instituciones Intermedia y al Secretario de Gobierno, afines a Carrizo. Es más, ante la duda de saber si Soler estaba en condiciones de asumir en el cargo, los Concejales le hicieron un pedido a la Clínica El Castaño para que remitiera la información del alta médica y de esa manera conocer si el jefe comunal estaba en condiciones regresar al sillón de intendente. El centro de salud rechazó el pedido de los ediles manifestando que sólo los familiares o el interesado puede pedir información sobre la condiciones de salud de un paciente. Con esa respuesta y ante la necesidad de poner claridad a la situación, los concejales llamaron a sesión extraordinaria y por unanimidad firmaron la norma jurídica, pero ahora ese documento pone un manto de duda todo lo que Leopoldo Soler firmó desde que se puso en funciones, desde el viernes y hasta ayer, donde la nueva ordenanza quedó aprobada. 


Daniela Salinas, vicepresidente del Concejo y del Frente para la Victoria confirmó la aprobación del documento pero aclaró que “entendemos que lo firmado desde el viernes, no tiene validez”.
 

Decreto cuestionado
El primer documento que firmó Leopoldo Soler una vez que llegó al municipio de Ullum, el viernes pasado, fue un decreto para dejar sin efecto la ordenanza municipal aprobada el 16 de febrero, día que el intendente termina internado por problemas de salud. Ahora el conflicto surge para saber si ese documento es válido ya que, según se puede leer, declara la “extinción” de una ordenanza, algo que no está permitido y que en su caso debería ser a través de otra ordenanza.