La ex ministra de Salud Graciela Ocaña criticó con dureza al gobierno al afirmar que quedó "atrapado en la ‘Moyanolandia’" porque el secretario de la CGT "tiene una red de relaciones con sociedades manejadas fundamentalmente por sus familiares" y aseguró que impidió que "se robaran el dinero de los trabajadores".

Sostuvo que había una disputa por "la caja sindical" de unos dos mil millones de pesos y recordó: "Me peleé hasta con Alberto Fernández (ex jefe de Gabinete) y con mucha gente del Gobierno" a raíz de las medidas sobre las obras sociales sindicales.

"Moyano tiene una red de relaciones con sociedades manejadas fundamentalmente por sus familiares, su esposa, sus hijastros, que están de los dos lados del mostrador: son las que les dan servicios a las obras sociales, las que construyen los sindicatos", denunció Ocaña en declaraciones al diario La Nación, al hablar por primera vez desde su renuncia. Puntualizó que "las empresas que maneja la mujer de Moyano son Iarai S.A., gerenciadora de la obra social de camioneros y Aconra Construcciones, que hace las reformas de los consultorios y de los sanatorios".

"Los trabajadores aportan para la obra social, que pasa los fondos a las empresas de Moyano, donde queda la ganancia. Por eso digo que está de los dos lados del mostrador", enfatizó. Recordó "hubo mucho enojo, por ejemplo, porque se repartieron 48 millones de pesos en fondos para actividades preventivas".

"Ese dinero jamás fue rendido y yo le pedí al superintendente de Servicios de Salud, Juan Rinaldi, que pidiera a todas las obras sociales que rindieran esos fondos. A su vez, di orden para que suspendieran otros 100 millones dispuestos a ser enviados de esa forma. Sé que eso enojó a mucha gente", precisó.