Gran polémica desató ayer la decisión de Juan Carlos Caballero Vidal de condicionar su renuncia al otorgamiento de la jubilación. En la nota presentada al presidente de la Corte de Justicia de San Juan, el cortista había aclarado que continuaría "desempeñando sus funciones, con percepción de los haberes correspondientes, hasta que la ANSES comunique que le ha sido acordado el beneficio –de la jubilación- y la fecha en que comenzará a percibir el importe del beneficio”.
Hoy, la situación cambió y Caballero Vidal decidió modificar su postura. En un nuevo escrito aseguró que dejará su cargo el 1 de diciembre, sin ningún tipo de condicionamiento, tal como aseguraron fuentes judiciales.
Según trascendió, la Cámara de Diputados aceptará mañana la renuncia y en la Justicia federal no descartan detenerlo cuando pierda los fueros.
Caballero Vidal se encuentra jaqueado por un pedido de juicio político del juez federal Leopoldo Rago Gallo, quien buscaba desaforarlo a través de la destitución para poder indagarlo por delitos de lesa humanidad.