En cada reunión familiar o con amigos, las achuras ganan terreno como las grandes protagonistas de la parrilla. Con un buen fuego y algo de dedicación, pueden competir e, incluso, superar a los cortes más caros, aportando carácter, jugosidad y ese toque criollo que distingue a un verdadero asador.

Dentro de este universo aparece una pieza muy apreciada, reconocida por su ternura natural y sabor marcado. Es un producto que aporta riqueza gastronómica y que, pese a su categoría especial, sigue siendo una opción accesible para quienes valoran calidad y tradición en un mismo bocado.

¿Cuál es la achura tradicional que es una bomba de sabor?

La molleja es una de las achuras más valoradas dentro de la parrilla argentina. Se obtiene de la glándula timo o de la zona del corazón del animal, según la variedad, y es reconocida por su textura suave y sabor distintivo que conquista a los amantes del asado.

Entre sus virtudes, destaca su capacidad para dorarse por fuera sin perder jugosidad interna. Su textura cremosa, sumada a la crocancia que adquiere con una correcta cocción, la convierte en un bocado irresistible. Además, combina perfectamente con limón, chimichurri, hierbas frescas o preparaciones más elaboradas.

En cuanto a sus características nutricionales, la molleja aporta proteínas de buena calidad, minerales esenciales como hierro y fósforo, y vitaminas del complejo B. Es un alimento energético, con alto contenido en grasas saludables cuando se consume en porciones moderadas.

Tip de cocción a la parrilla

Para obtener una molleja perfecta, lo ideal es blanquearla primero durante unos minutos en agua caliente para retirarle impurezas y exceso de grasa. Luego, secarla bien y colocarla sobre brasas fuertes, sin moverla demasiado. 

El secreto está en lograr un dorado parejo y mantener la jugosidad interna. Un toque final de limón realza su sabor y aporta frescura, y si se acompaña con hierbas picadas o un chorrito de oliva, el resultado se vuelve aún más irresistible.

Recetas en las que se puede usar la molleja

  • Mollejas doradas con limón
  • Mollejas al verdeo
  • Mollejas salteadas con hongos
  • Risotto cremoso con mollejas
  • Tacos con molleja crocante
  • Mollejas en salsa de vino blanco
  • Bruschettas con molleja y hierbas
  • Mollejas grilladas con ensalada fresca