A pesar de que llegó a Argentina en 2012, aun la mayoría de las mujeres no conocen su existencia. Se trata de un método anticonceptivo altamente eficaz (99%), de rápida colocación, muy escasos efectos secundarios y 3 años de acción.

Está destinado para todas las mujeres en edad fértil, desde los 14 años en adelante.

El sistema consiste en un implante subdérmico (se aplica bajo la piel) de liberación continua, que diariamente va distribuyendo la dosis precisa de "etonogestrel’, una droga derivada de la progesterona (hormona encargada, entre otras cosas, de manejar el ciclo menstrual). El etonogestrel tiene doble mecanismo de acción: por un lado inhibe la ovulación y por otro espesa el moco cervical para que los espermatozoides no lleguen al óvulo, por eso es que su efectividad es casi absoluta.

 

Aplicación

El implante mide 4 centímetros de longitud y 2 milímetros de diámetro, y es más fino que el tubo de una lapicera descartable (tiene un tamaño y diámetro similar al de un fósforo de madera).

La colocación es sencilla y demora menos de 20 minutos. Primero se realiza asepsia y antisepsia sobre la piel para dejar la piel completamente higienizada y desinfectada; luego se aplica anestesia local inyectable y finalmente se coloca con un disparador, un aplicador que tiene cargado en su interior el implante. Se introduce la aguja, se dispara, la aguja se retrae y deja aplicado el implante paralelo a la piel.

La colocación se realiza en la cara interna del brazo, cerca de la axila, en el tejido celular subcutáneo. Se usa el brazo no dominante, es decir si la paciente es diestra el brazo izquierdo y viceversa.

Una vez colocado pueden retomarse las actividades normales inmediatamente, y no tiene ninguna restricción ni requiere cuidados posteriores.

El implante es apenas visible al estirar la piel, y debido a que es flexible su presencia para quien lo lleva es imperceptible.

 

Tres años después

El implante inocula etonogestrel durante 3 años; al pasar este tiempo hay que retirarlo, para lo cual nuevamente se inyecta un anestésico, con una pinza se extrae y se realiza un punto de sutura, que al cicatrizar no suele dejar cicatriz.
El implante puede reemplazarse por uno nuevo en la misma intervención, ya que no precisa tiempo de descanso.

Para saber más

-Normalmente las pastillas anticonceptivas contienen estrógenos y progesterona como componentes de acción. El hecho de contener sólo progesterona, hace que el implante reduzca los efectos secundarios.

-No hay riesgo de olvidos en las tomas.

-Puede usarse durante la lactancia.

-Al extraerlo inmediatamente se recupera la fertilidad.

-Pueden colocarlo los ginecólogos, y eventualmente los médicos de familia que han recibido instrucción.

-Los requisitos son: realizarse previamente un papanicolau. Si la paciente tiene más de 40 años pueden solicitarse estudios complementarios (colposcopía, ecografía ginecológica y mamografía)

Costos

En el mercado existen 3 implantes autorizados, pero en Argentina sólo se comercializa uno: Implanon NXT. Este producto tiene un precio de $4.937,80, y las obras sociales no lo reconocen. (Farmacia Uno)

El "Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable del Ministerio de Salud de la Nación’, provee a los centros de salud y hospitales públicos partidas mensuales de implantes gratuitos.

El programa está especialmente pensado para evitar el segundo embarazo adolescente; aunque para recurrir al plan se toman en consideración los casos y la necesidad en particular, independientemente de la edad de la mujer.

 

Efectos secundarios

-Spoting (eliminación de gotas se sangre). Esto puede obligar a retirar el implante.

-Amenorrea (ausencia de menstruación).

Contraindicaciones

-Padecer trombosis venosas profundas o embolias pulmonares (en estos casos es conveniente realizar estudios anexos).

-Historia personal de cáncer de mama.

-Tumores malignos de hígado.

-Embarazo.

Sistema probado 

El implante subdérmico comenzó a implementarse en 1967, con la idea del uso de cápsulas poliméricas subdérmicas de liberación prolongada.

En 1983 en Finlandia apareció el primer implante con levonorgestrel, y en 1998, en Indonesia se usó por primera vez un implante de segunda generación, a base de etonogestrel.

Hasta la actualidad este método se ha aprobado en más de 60 países, y ya ha sido usado por más de 11 millones de mujeres en el mundo.

En Chile, Brasil y Colombia se aplica hace más de 15 años, y su uso incluye a un alto porcentaje de mujeres menores de 20 años.

Fuente: Oscar Andreatta, ginecólogo y obstetra.