La circulación sanguínea es un aspecto vital en el organismo de cualquier persona. Así, existen determinados factores que pueden influir en un mal funcionamiento por parte del aparato circulatorio, al igual que diferentes síntomas indican una inadecuada circulación de la sangre.

En el ámbito médico se llama ‘mala circulación sanguínea’ a la dificultad de la sangre para transcurrir a través de las venas y arterias. Dicho problema puede ser causado por diferentes motivos.

Así, para saber si tenemos una mala circulación sanguínea es necesario tener conocimiento sobre los posibles síntomas que indican este problema en el aparato circulatorio del organismo.

* Síntomas que indican mala circulación

Según señalan los especialistas médicos, identificar la causa del problema en el aparato circulatorio es fundamental para encontrar una solución adecuada. Del mismo modo, para recomendar con tratamiento idóneo también es necesario conocer los síntomas y la frecuencia con la que se manifiestan.

Así, desde ‘Vari Centro’, centros médicos especialistas en varices, aportan 10 síntomas que advierten de posibles anomalías en la circulación sanguínea en el aparato circulatorio:

- Comezón en las piernas.

- Piel fría, escamosa o seca.

- Manchas rojas en las piernas.

- Tobillos y pies hinchados.

- Presencia de pequeños vasos o varices.

- Calambres en las piernas.

- Ausencia de vellos en las piernas.

- Grietas en los talones.

- Sensación de hormigueo, pinchazos o adormecimiento en las piernas.

- Coloración pálida o de color azulado en las zonas de mala circulación.

Generalmente, es normal que estos síntomas de mala circulación empeoren al final del día, especialmente si el paciente ha permanecido durante mucho tiempo de pie.

Además, otros factores que pueden influir en la incidencia de estos síntomas son el ciclo menstrual en días de mucho calor o cuando se usan sandalias planas o tacones.

* Causas de problemas en el aparato circulatorio

Los problemas de mala circulación sanguínea en el aparato circulatorio son un aspecto de salud grave que es necesario atajar cuanto antes, ya que puede derivar en importantes perjuicios para el organismo.

Así, una mala circulación puede deberse a diferentes factores. Por ejemplo, cuando existe exceso de peso y sedentarismo el retorno venoso se vuelve más complicado, provocando hinchazón y cansancio en las piernas.

Estos son otros factores que influyen en un mal funcionamiento del aparato circulatorio:

- Permanecer durante mucho tiempo de pie, sentado o con las piernas cruzadas. Dificulta el retorno sanguíneo hacia el corazón.

- Durante el periodo de embarazo, la madre produce más líquido para mantener la irrigación de la placenta y esto dificulta la acción de las venas.

- El envejecimiento natural de los vasos sanguíneos es también una causas común de los problemas de circulación.

- Hormonas presentes en anticonceptivos. Éstas pueden aumentar el riesgo de formación de trombos en algunas mujeres y dificultar la circulación.

- Presencia de enfermedades crónicas, como hipertensión o diabetes.