La pérdida muscular es un rasgo del envejecimiento. A medida que nos hacemos mayores, cambia la composición del cuerpo, este reduce masa muscular y aumenta su porcentaje de grasa. Pero en esta tendencia también influye mucho el estilo de vida: quien no hace ejercicio físico y lleva una vida sedentaria tiene mayor riesgo. Pero hay alimentos que ayudan a cuidarlos, mientras que otros es mejor evitar. Conozcamos cuáles son. Para cuidar los músculos, es conveniente comer garbanzos, alubias y lentejas tres veces a la semana

La pérdida muscular comienza a los 40 años. A partir de esta edad perdemos el 1 % de nuestra masa muscular cada año, afirman los especialistas. Pero esta tendencia es en especial importante una vez que cumplimos los 80 años, ya que, a partir de ese momento, se produce una aceleración dramática de la pérdida muscular. Es entonces cuando hablamos de sarcopenia.

Para frenarla lo más importante es llevar un estilo de vida saludable, no sedentario, por lo que se debe incluir ejercicio físico de forma habitual. Pero también para reducir la pérdida de músculo hay que alimentarse de manera adecuada.

1. Aceite de oliva, mejor si es virgen extra

La dieta mediterránea esconde los mejores secretos para cuidar los músculos. Lo primero es tomar aceite virgen extra, si se puede, y si no, aceite de oliva. En el mundo de las grasas, no todas son iguales. Pero el aceite de oliva virgen extra es una fuente grasa de origen vegetal que los expertos destacan por su valor nutricional y sus beneficios para la salud; también para proteger los músculos.

2. Legumbres, tres veces a la semana

Para cuidar los músculos, es conveniente comer garbanzos, alubias y lentejas de forma habitual. Consumir legumbres es la mejor manera de incorporar proteínas vegetales de buena calidad. Y estas son esenciales para cuidar los músculos. La recomendación es tomarlas por lo menos tres veces a la semana.

3. Huevo

Wl huevo es otra fuente importante de proteínas de buena calidad para los músculos. La doctora aconseja comer huevo al menos cuatro veces a la semana.

4. Leche, mejor entera

La leche es fuente natural de compuestos activos buenos, como el ácido butírico, el ácido linoleico y los fosfolípidos, que ayudan a prevenir algunas enfermedades crónicas. La grasa láctea también contribuye a proteger los músculos. Por eso, si el objetivo está en frenar su pérdida, conviene tomarla entera.

5. Pescados azules: de la sardina al atún

El pescado azul es otra buena fuente de proteínas de buena calidad. De ahí que comer sardinas, atún, salmón y caballa de forma equilibrada ayude a frenar el deterioro muscular típico de la edad.

6. La carne, que sea de pollo

La recomendación general para cuidar los músculos "es tomar menos carne". Y si se toma, esta debe ser carne blanca (carne de aves), es decir, pollo y pavo. En cualquier caso hay que evitar las carnes rojas o muy saturadas.

7. Frutas y verduras

Pero además de proteínas, para reducir la pérdida de músculo el cuerpo necesita iones que se obtienen a través de la fruta y la verdura. Los expertos dicen que hay que tomar, por lo menos, entre dos y tres porciones de verdura diarias y tres piezas de fruta.

8. Nueces

Otra fuente de grasa buena para prevenir el deterioro muscular son los frutos secos. Y aquí la variedad es enorme: desde nueces y almendras hasta cacahuetes o avellanas. Eso sí, si se quiere cuidar los músculos, hay que tomarlos tres veces a la semana.

9. Evitar el pan blanco

Los científicos han encontrado que existe una relación entre la dieta y la edad en que desaparece la menstruación. Resulta que comer mucha pasta y arroz refinado (blancos) puede explicar por qué algunas mujeres empiezan la menopausia antes que otras.