Esta mañana comenzaron los festejos de los 80 años del Club Andino Mercedario con FestiBoulder (competencia de escalada que termina con una fiesta), y continuarán durante toda la semana. La fecha exacta de fundación fue un 23 septiembre de 1945, momento a partir del cual inició la tarea de formar montañistas, difundir las actividades de montaña, y participar de búsquedas y rescates que luego serían históricos. Varios de ellos quedaron en la memoria colectiva de los sanjuaninos por su impacto social y por las dificultades que los rescatistas debieron sortear.
Guillermo Peralta, el rescate milagroso
Sin lugar a dudas, uno de los rescates que más conmocionó a San Juan fue el de Guillermo Peralta ocurrido hace exactamente 24 años. El joven montañista se perdió en abril de 2001 en el Cerro Blanco, Zonda, y movilizó a toda la provincia, comenzando por el gobernador de ese momento, Don Alfredo Avelín, que dispuso el operativo inmediato.
Participó la Dirección Provincial Aeronáutica, el Cuerpo de Bomberos, Gendarmería, el Ejército, particulares y miembros del Club Andino Mercedario, quienes tuvieron un rol más que especial, ya que uno de sus integrantes, Esteban Arellano, fue quien lo encontró a los 11 días en una grieta de aproximadamente 15 metros a unos 4.500 metros de altura.

Guillermo había escalado el cerro junto a Sebastián Navarro, pero cuando hicieron cumbre, decidió seguir un poco más y escalar el cerro Blanco. Un accidente le impidió regresar y pese a una intensa búsqueda, su amigo no volvió a verlo, por lo que decidió bajar para pedir ayuda.
Primero comenzaron a buscarlo andinistas y policías. Ya en los últimos días, más de 100 montañistas, dos helicópteros, decenas de camionetas, motos y caballos se sumaron a los rastrillajes, convirtiéndose en el operativo de rescate más importante de la historia de la provincia. Guillermo apareció vivo -tras todo mal pronóstico-, gracias a un puñado de pasas que llevaba en su bolsillo y agua de deshielo que caía de a gotas. Milagros si los hay.

Cuando este rescate cumplió 10 años, Diario de Cuyo, dialogó con Esteban Arellano. ‘El 11 de abril del 2001 es una fecha inolvidable tanto para mí como para Luis Codorniú, el otro rescatista. Ese día aprendí que la esperanza nunca se debe perder y que las ganas de vivir desafían a la muerte‘, dijo en ese momento.
Habían pasado 11 días de búsqueda sin resultados positivos, por eso cuando Arellano volvió a subir al cerro decidió gritar con todas sus fuerzas por las dudas que pudiera escucharlo. ‘Fue algo que hice de manera espontánea, como si algo me impulsara a hacerlo. Y dio resultado. Desde el fondo de una grieta y con voz temblorosa, por los 5 grados bajo cero, Guillermo contestó a mi llamado‘, agregó en aquella entrevista.
Con cuerdas y poleas, Esteban bajó y le acercó un chocolate, mientras Luis regresó al punto de partida para comunicar la buena nueva y buscar ayuda. Ante la imposibilidad de lograr un descenso exitoso, pasaron la noche allí. Luego de sacarlo de la grieta, le dieron agua, pasas y un picadillo. Lo cubrieron con una colcha térmica y durmieron.
Arellano pasó muchas horas con el joven perdido, por lo que seguramente debió oficiar de guardia emocional, hasta que pudo concretarse el rescate al día siguiente.
Todo San Juan celebró entre llantos y aplausos la llegada del helicóptero al Hospital Rawson donde recibió la atención necesaria para salvar su vida.
Peralta, prácticamente no volvió a mostrarse en público, y en la actualidad estaría viviendo en Chile.
Julia Horn, con triste descelance
Otro de los casos conmocionantes fue el del operativo de búsqueda de Julia Horn, la joven alemana que desapareció en mayo del año pasado en el cerro Tres Marías, y lamentablemente fue encontrada sin vida.

Los integrantes del Club Andino Mercedario, una vez más estuvieron allí. Fue el 23 de Mayo del 2024, cuando la turista alemana de 19 años, decidió encarar el ascenso del Cerro Tres Marías que cuenta con una altura de 1050 metros y no presenta mayores dificultades técnicas, pero la montaña siempre demanda la presencia de un guía experto que permita transitar la zona.
Varias horas después se conoció que la joven no había regresado y comenzó la búsqueda que tuvo en vilo a los sanjuaninos y parte de Alemania, su país de origen.
Julia había caído por un barranco, sufriendo múltiples heridas que provocaron su muerte. El cuerpo fue localizado desde un helicóptero, y así comenzó el rescate. Fue muy complejo y a contrarreloj para ganarle a la luz natural.
Recién con las últimas luces de la jornada, lograron llegar hasta el cuerpo, lo rescataron y finalmente lo bajaron ya siendo de noche, cerca de las 20.30
Quienes estuvieron abocados al rescate fueron los integrantes del Grupo Geras de la Policía de San Juan, los montañistas del Club Andino Mercedario y Gendarmería, todos coordinados por la UFI Delitos Especiales.
El heroico rescate de un rosarino
A mediados de mayo de 2018 los integrantes del Club Andino Mercedario de Barreal recibieron una llamada -casi a la medianoche-, que avisaba de la grave caída del montañista rosarino, Duilio Javier Protti, en el cerro Pachaco a unos 3.500 metros de altura.
Has
ta donde estaba ubicado sólo podía ascender un equipo especializado y allí estaba la gente del Andino. Un grupo de 13 hombres salió a rescatarlo en plena noche y varias horas después cumplieron con su cometido.
Protti tenia entonces 38 años y había emprendido el ascenso al Pachaco con su compañero Julio Campañaro. Ambos contaban con experiencia en la materia, pero siempre existe la posibilidad de un imprevisto.
La gran dificultad de este cerro es que tiene una pared muy empinada, con muchos arbustos y rocas, y aunque los escaladores cumplieron con todos los requisitos, Protti pisó una piedra medio partida y cayó.
Eso le provocó un fuerte golpe con fractura de clavícula y de una pierna. Esto si contar que sufrió una fuerte hemorragia.
Campañaro fue el encargado de pedir ayuda. Logró llegar hasta el
el límite de El Palque Zonda y Calingasta, y a siete kilómetros de la ruta encontró el campamento de una empresa, y el sereno se encargó de llamar de inmediato al club.
‘Los muchachos se estaban por acostar cuando sonó el teléfono, y definimos armar un equipo en el que también participó el Club Andino Barreal‘, contó Sebastián Aguiar, encargado de planificar el rescate, al diario Rosario Nuestro que cubría de cerca esta noticia.
De inmediato, el grupo recorrió los 130 kilómetros, escaló durante dos horas, hasta llegar al lugar y realizar los primeros auxilios.
Recién a las 5 de la madrugada comenzó el difícil descenso con el escalador en una camilla y su salud bastante complicada.
Lo lograron y lo calificaron como ‘una hazaña heroica‘, debido a las características del Cerro.
Tanto es así que en el Facebook del Andino Mercedario se puede ver el festejo de los integrantes del Club en Barreal, grupo GERAS y miembros de Protección Civil que participaron del rescate en la pared del Pachaco.
‘Con gran esfuerzo, voluntad y capacidad, lograron realizar una hazaña heroica‘, dice el epígrafe.

