Preservar y recuperar el bosque nativo y hacer ganadería rentable son dos acciones posibles y así pudo comprobarlo Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO en su visita al Campo Don Abel del departamento Valle Fértil, propiedad del empresario Abel Badino; acompañados por el veterinario Gabriel Zerpa y el encargado Edgar Barrionuevo.
El campo está aproximadamente a 11 kilómetros de la Villa Cabecera San Agustín, mientras el puesto principal, Pozo Suerte, de la estancia de unas 11 mil hectáreas llamada "Don Abel", se encuentra a unos 7 kilómetros de la ruta ingresando por una huella. En este predio se crían actualmente unos 900 animales vacunos, aunque el número varía según la "carga que pueda soportar el campo por las lluvia y consecuente disponibilidad de alimentos sea posible. En total el campo tiene 4 puestos: Pozo Suerte, Don David, El Retamo y Los Barrientos".
"La actividad que se desarrolla es la silvopastoril con ganadería integrada", comenzó explicando el doctor Zerpa, agregando: "Es importante por la mentalidad conservacionista del productor ganadero Abel Badino, explotando una actividad productiva conservando el bosque nativo. Acá también es importante el apoyo de la Secretaría de Medio Ambiente en general y de su subsecretario Marcelo Jordán en particular, con sus aportes para demostrar al resto de los organismos del estado y los empresarios que la ganadería, cuando es sustentable y preserva medio ambiente, también puede ser rentable".
"Si bien desde siempre se apostó a la sustentabilidad sin modificar el medio ambiente, desde el año 2011 se intensificaron las acciones gracias al programa del gobierno provincial, recibiendo aportes no reembolsables para la construcción de boyeros". Ahora avanzan en la gestión de uno para implantación intensiva de un bosque de algarrobos con riego por goteo y también otras especies de forestales.
"Para hacer ganadería en estos sistemas, uno debe considerar cuáles son las ‘unidades ganaderas’ que uno puede tener adentro, la mayoría de la gente se confunde y consulta cuántas cabezas de ganado pueden contenerse. En realidad de concepto más acertado, es hablar del ‘equivalente vaca’ o vaca de 400 kilogramos con un ternero de hasta 6 meses y en gestación. Donde el kilaje del novillo que se comercializa depende de factores como la raza y la disponibilidad de alimentos entre otros factores".
Destacó: "Lo más importante del campo y del sentido de estos animales es el manejo silvopastoril, preservando y recuperando el monte nativo. Se protege el bosque y como corolario existe un terrible desarrollo ganadero y al mismo tiempo se potencia la productividad por hectárea".
"En este árido chaqueño donde los bosques no son preservados, la relación de productividad es de 200 gramos de carne por hectárea por año. Mientras que en un bosque como este, con manejo sustentable por esta ley que permite comprar alambre o el enriquecimiento del monte nativo, la relación puede aumentar hasta los 12 o 13 kilogramos de carne por hectárea por año".
"La cantidad de pasto que tiene el campo determina el tamaño del rodeo bovino conformado por vacas, vaquillonas, terneras, terneros, novillitos, toritos y toros. Cuando el productor no tiene en cuenta esto, el campo se vuelve improductivo, el rodeo se achica y la rentabilidad se pierde, por la capacidad de criar terneros del animal está directamente vinculado a la nutrición del animal", explicó Zerpa.
Acá todas las especies son importantes, tanto los árboles como los arbustos. El Algarrobo, Quebracho colorado y el Orco Quebracho o Quebracho blanco, la Brea, el Tala el Tintitacu y hay muchísimas especies de arbustos que sirven para leer el adecuado manejo del bosque".
Finalmente el doctor Zerpa remarcó: "La ganadería rentable es como una mesa donde los cuatros pilares o patas son clave para el desarrollo exitoso: sanidad, genética, nutrición e infraestructura que merecen un desarrollo equilibrado. Estos pilares se coronan con la formalización de la comercialización para acceder a los mejores precios y condiciones".

