Carlos Freire comentó con orgullo a Suplemento Verde esta semana: "Estamos muy contentos de lograr esta certificación de la Organización Internacional Agropecuaria (OIA). Seguimos optimizando procesos, buscando la máxima calidad final y fundamentalmente escuchando a nuestros principales clientes, los chacareros".

Continuó: "Nosotros somos una empresa pyme dedicada a la producción de plantines hortícolas desde hace ya 25 años, siempre enfocada en buscar las mejoras del sector en cuanto a la producción de tomate para industria preferentemente, y que poco a poco fue creciendo".

Mencionó luego "siempre estamos incorporando tecnología y sumamos técnicas de manejo. como son las Global GAP, normas internacionales. Siendo el único vivero de Sudamérica que certificado estas normas".

Al ser consultado sobre la capacidad, el responsable del mismo dijo que "en su capacidad máxima puede abastecer en temporada unas 2.000.000 de bandejas de plantines. También se producen otros vegetales, ya que se está incursionando en otro tipo de especies, que le generan la posibilidad de mantener al vivero activo gran parte del año".

Freire aseguró que "el 80 por ciento de lo que hacemos es tomate para industria, que se distribuye por todo el país. Luego la lista integran melones, cebollas, pimientos, berenjenas, lechugas, brócoli, sandías, apios, hinojos, repollos, zapallos, espárragos, coliflores y lo que la gente pida".

La empresa se encuentra en el departamento de Junín provincia de Mendoza. Dicha localidad queda a 50 km al este de la capital provincial.

Haciendo un poco de historia, los inicios dicen que Víctor Hugo Barroso comienza a realizar las primeras experiencias de forma experimental a comienzos de los años 90. El señor llevaba muchos años de su vida haciendo chacras de tomate y conocía muy bien las problemáticas que se presentaban a la hora de trasplantar. En ese momento no existía el plantín como hoy en día lo conocemos, sino que cada productor debía realizar sus propios almácigos en parcelas y luego trasplantarlas a raíz desnuda perdiendo gran cantidad de los mismos, siendo en algunos casos inviable el cultivo y perdiendo eficiencia. Los productores no dudaron en cambiar para siempre con la vieja metodología dando inicio a una empresa conocida como Vivero San Nicolás S.A. que fue creciendo año tras año.

Siempre partícipe de la Asociación Tomate 2000, es activo integrante de todo lo vinculado a esta noble actividad. 

25  años lleva el emprendimiento en la multiplicación de plantines de hortalizas.

4 hectáreas bajo plástico posee la empresa en Junín, Mendoza.

2 millones de bandejas de plantines hortícolas se producen.

Más datos: 

Vivero San Nicolás. Cel: 263-4515262. Ruta 60, Km 13,5, Junín, Mendoza.