Muchas veces los problemas respiratorios y la tos se agravan por el polvo que suele haber en casa, el humo y las cenizas en el aire. También por los hongos que viven en lugares húmedos y poco ventilados. Por eso es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
Humo
* No fumar, ni permitir fumar dentro de la casa.
* Controlar el tiraje de estufas y cocinas a leña.
* Encender y apagar siempre afuera de la casa tanto braseros y estufas a kerosén.
Monóxido de carbono
* Mantener ventiladas las habitaciones donde hay brasas o una llama de cualquier clase (hornallas, hornos, calefones, estufas).
* Retirar los braseros de la habitación donde se duerme. Es un gas que no se ve ni tiene olor, pero es muy peligroso.
Moho y humedad
* Si hay que secar ropa dentro de la casa, evitar hacerlo en la misma habitación que están los niños.
* No secar ropa con el horno: consume mucho oxígeno.
* Evitar colocar recipientes con agua arriba de las estufas.
Uso de insecticidas
* Evitar la aplicación de insecticidas en aerosol en presencia de niños. Guardarlos lejos del alcance de ellos.
Se reduce la necesidad de usar estos productos manteniendo la limpieza de la casa.
* Ante mareos, dolor de cabeza, náuseas y/o somnolencia, es importante abrir puertas y ventanas, sacar a la persona de ese ambiente y acudir urgente al Centro de Salud más cercano.
(Fuente: doctora Marcela Segovia, Gerente de Medife, filial San Juan).