Desmaquillarse diariamente es esencial para el cuidado de la piel. Al tiempo, algunos errores comunes al momento de sacarse el maquillaje pueden ser perjudiciales.

Hay que recordar que, retirarse el maquillaje es determinante para conservar su salud debido a que ayuda a eliminar restos de sudor, células muertas y grasa.

A continuación, los errores más comunes al desmaquillarse:

1. Desmaquillarte rápidamente

El error más común que cometen las mujeres al momento de desmaquillarse es rápido y sin pensar. La razón detrás de ello es que se descuidan pasos importantes que garantizan una limpieza profunda y suficiente.

Hay quienes dirán que lo importante es retirar el maquillaje y ya está. Pero cuando se hace rápidamente, ¿se eliminan todos los restos de productos de belleza? Lo más seguro es que no. De hecho, estudios científicos indican que los cosméticos pueden contribuir a la aparición de acné o a agravar este padecimiento. Aunque aún falta profundizar más, se sabe que esto ocurre porque los restos de maquillaje obstaculizan los poros e impide que la piel expulse sus grasas naturales.

2. No desmaquillarte todos los días

Los riesgos a corto y a largo plazo van desde la aparición de acné hasta puntos negros, arrugas marcadas, deshidratación y sequedad. Y es que, según lo recomiendan artículos de investigación, es primordial desmaquillarse todos los días. Incluso, en función del tipo y las características de cada piel, la cara debería limpiarse de una a dos veces cada día, no solo con productos desmaquillantes, sino con abundante agua.

De esta manera, se garantiza la eliminación de restos de cosméticos, contaminación, sudor y grasa acumulada durante el día.

3. Usar productos desmaquillantes inadecuados

Así como existen tipos de maquillaje, hay tipos de desmaquillantes acordes a cada uno. Por eso, es un error emplear un producto inadecuado para los cosméticos que se están utilizando.

Por ejemplo, si usas maquillaje a prueba de agua y de alta resistencia, deberías usar un desmaquillante bifásico, que mezcla una base de agua con una de aceite para garantizar una limpieza más profunda.

En este mismo sentido, es otro error usar toallitas desmaquillantes todos los días. Si bien son una opción rápida, el material del que están hechas puede ser abrasivo a largo plazo. Al frotarlo sobre la piel, la fricción puede causar sensibilidad y desgaste.

4. Descuidar zonas delicadas como los ojos

Una publicación de Offarm indica que la piel del contorno de los ojos es mucho más fina que la reviste el resto del rostro y el cuerpo. Por ende, hay que asumir que es mucho más delicada. Esto no solo porque es poco gruesa, sino porque es más elástica y tiene pocas glándulas sebáceas.

Debido a tales características, requiere de un cuidado especial, ya que los agentes externos —como los rayos del sol, la contaminación y el maquillaje— pueden afectarla en un grado más alto.

Por lo tanto, al momento de retirarle el maquillaje, se recomienda emplear un producto hipoalergénico o especial para la zona. Su aplicación debe ser suave, sin presionar en exceso.

5. Olvidarse del contorno de la cara y el cuello

La mayoría de las mujeres saben que hay que maquillar muy bien los contornos de la cara y el cuello para lograr un acabado uniforme y natural. No obstante, uno de los errores más comunes al momento de desmaquillarse es olvidar dichas zonas.

En consecuencia, los poros se pueden saturar y es posible desarrollar puntos negros, granos y otras imperfecciones. Eso sin contar con que puede quedar una mancha de maquillaje sobre la almohada.

6.  Saltarte el tónico facial

A través de un artículo de Farmacia Profesional, expertos sugieren el uso de tónicos faciales después de usar desmaquillantes. ¿La razón? Estos productos ayudan a normalizar la piel y complementan la limpieza.

Y es que después de una rigurosa rutina, aún pueden quedar restos de cosméticos y suciedad en el rostro. El tónico sella y elimina cualquier residuo. Sumado a esto, prepara la dermis para la hidratación y ayuda a estimular la circulación.

7. Olvidarse de la hidratación

Olvidar el proceso de hidratación después de desmaquillarse es otro error frecuente. Al estar compuesta en gran medida por agua, es un elemento fundamental para mantener su salud y su estética. La deshidratación es una causa principal de la piel áspera y seca.

Por tal motivo, cualquier rutina que involucre el cuidado facial tiene como paso obligado la hidratación. Algunas cremas recomendadas son las que contienen retinol, vitamina E, ácido hialurónico, ácido láctico y ceramidas.