Mientras las zapatillas blancas impolutas de las tres rayitas siguen siendo unas de las preferidas de las fashionistas, Gucci acompañó su colección Resort 2018 por un modelo que no se le parece en nada.
 

Entre sus piedras brillantes, mil texturas, perlas y coronas, resaltaron sus zapatillas sucias (roñosas, para ser exactos) como si hubieran sido usadas durante un mes sin interrupción. Este modelo todavía no está a la venta, así que todavía no nos podemos indignar por el precio.
 

Igual, hay que decirlo. No se trata de una pieza en particular sino de la mirada del diseñador de Alessandro Michele que permite mezclar todo con todo. La habilitación de que un vestido de seda floreado puede ir con zapatillas, como también una chaqueta de sastre o un abrigo de piel y terciopelo.