El fabricante japonés de neumáticos Bridgestone anunció ayer un cese temporal de sus actividades en Argentina, debido a un "conflicto" con el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA).

"Como resultado del conflicto en curso, Bridgestone ha decidido cerrar temporalmente todas las operaciones en Argentina para proteger a cada persona que integra nuestro equipo y garantizar la integridad de nuestra propiedad", señaló la multinacional en un comunicado.

El cese de actividades afectará a la planta de Bridgestone en Llavallol (provincia de Buenos Aires), sin que la compañía haya adelantado una fecha concreta para el retorno de las operaciones.

El SUTNA anunció este miércoles un paro total de actividades "hasta nuevo aviso", que incluyó movilizaciones y acampes en el Ministerio de Trabajo para reclamar una mejora de sus salarios.

Bridgestone tiene 1.600 empleados, a quienes en febrero había comunicado que pagaría un adelanto de $365.000 a cada uno por la participación en las ganancias, un premio de carácter no remunerativo que en todo el año ascendió a $735.000. Ese bono se terminó de pagar en los últimos días, en pleno conflicto.

De hecho, la decisión coincidió con un nuevo bloqueo del gremio que dirige la Lista Negra del SUTNA. El gremio dispuso el miércoles un paro por tiempo indeterminado ("hasta nuevo aviso", según el comunicado del SUTNA) en protesta porque las empresas del sector habían ofrecido comenzar a negociar la paritaria 2022-2023 sin haber dado lugar a los reclamos salariales sobre el período anterior, es decir, la paritaria 2021-2022.

El nudo del prolongado conflicto gremial no es tanto el pedido de aumento salarial sino el reclamo gremial de incrementar 200% las horas trabajadas los fines de semana. Fue en ese punto que todas las negociaciones se estancaron hace casi cinco meses.

El conflicto ya había escalado el miércoles, cuando el SUTNA tomó el cuarto piso del edificio de Dirección Nacional de Relaciones del Trabajo, en Callao 114, Ciudad de Buenos Aires.

La conducción del SUTNA, políticamente vinculada al Partido Obrero, no ha contado con el apoyo de los principales gremios encolumnados en la Confederación General del Trabajo (CGT), los cuales en su mayoría son peronistas.

En un comunicado, la empresa Pirelli señaló: "Pese a nuestros esfuerzos por resolver la situación a través del diálogo, nos hemos encontrado con un sindicato cegado e intransigente. Por tal motivo, a partir de que se paralice la producción de neumáticos, la fábrica paralizará totalmente sus actividades productivas. Mientras persista el bloqueo no se genera el derecho a percibir remuneración".

Fate, la única de las tres empresas que es de capitales locales, envió ayer una carta documento al SUTNA donde exige que cesen las medidas de fuerza para poder retomar las actividades, "habida cuenta de la necesidad de cumplir con las exigencias vinculadas con la seguridad del personal, la indemnidad de los equipos y maquinarias, la convocatoria de personal e integración de los diferentes equipos de trabajo".